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Sanidad niega que se vaya a proponer un nuevo 'medicamentazo'

El ministerio será más restrictivo para incluir nuevos farmacos en la Seguridad Social

Lucía Abellán

La negativa sistemática del ministro de Sanidad, José Manuel Romay, desde que tomó posesión, a concretar el alcance de las medidas que anuncia provocaron ayer una nueva polémica sobre la financiación de medicamentos como anteriormente sucedió con las tasas por receta. El subsecretario, Enrique Castellón, se vio forzado a puntualizar, a renglón seguido, que no se va a aprobar una nueva lista de medicamentos no financiados por la Seguridad Social. "Se desmiente categóricamente la existencia de ningún medicamentazo", afirmó escueto y tajante Castellón.

A menos de 15 días de la presentación de los Presupuestos Generales del Estado, el ministro Romay avanzó el pasado lunes, pero no aclaró, las medidas que se propone incluir en la Ley de Acompañamiento a los citados presupuestos. Entre ellas la de "aplicar con más eficacia" el decreto de financiación selectiva de medicamentos, conocido popularmente como medicamentazo por cuanto su primer resultado fue la exclusión, hace dos años, de 800 especialidades de la gratuidad de la Seguridad Social.

Esta norma, aprobada por el Gobierno socialista y duramente criticada por el PP desde la oposición, separó por primera vez en España el registro de nuevos medicamentos y su financiación pública.

Romay, según fuentes de Sanidad, se propone ahora seguir aplicando el decreto, no por la vía de la exclusión de más medicamentos, sino evitando "el acceso a las prestaciones públicas de especialidades que no aporten ninguna ventaja significativa sobre las ya existentes". Esto significa que la Administración será mucho más restrictiva a la hora de incluir nuevos fármacos en la financiación pública. España es hoy uno de los países de la OCDE con mayor número de especialidades farmacéuticas registradas con similares propiedades.

Precios de referencia

Esta posibilidad restrictiva no fue explotada por el anterior equipo del PSOE autor del decreto, aunque la ex ministra de Sanidad y actual diputada del PSOE, Angeles Amador, se mostró ayer totalmente de acuerdo con esta vía. No así con una nueva lista negra de medicamentos a excluir del sistema público, posibilidad que fue tajántemente desmentida ayer por el subsecretario Enrique Castellón en declaraciones a TVE.

Otras medidas sugeridas por el ministro de Sanidad, el pasado lunes, como acompañamiento a los Presupuestos, son el establecimiento, por primera vez en España, de precios de referencia para una categoría de fármacos considerados de "eficacia terapéutica menor".

Las comillas se refieren a los fármacos, generalmente utilizados para patologías menores, y 'de similares características a los que se excluyeron con el controvertido medicamentazo. El Estado pondría un precio, basado en el más barato del mercado de sus características, y el usuario pagaría la diferencia hasta su coste real, como sucede desde hace años en Alemania.

Otra posibilidad es que esta medida forzara una bajada general de precios de todos los fabricantes. Esto explicaría el malestar que la noticia ha creado en Farmaindustria y la amenaza de esta patronal de romper el pacto recién firmado con Sanidad para la contención del gasto farmacéutico.

Sanidad se propone, igualmente, fomentar el uso de medicamentos genéricos, sin que el ministro quisiera explicar en su comparecencia a los medios de comunicación en que consisten las "modificaciones legislativas" que ha elaborado con tal fin. El mercado en España de estas especialidades -principios activos sin marca comercial y hasta un 50% más baratas-, es apenas de un 2%, frente al 15% de otros países de la UE.

El uso de genéricos es una reivindicación en la que coinciden todas las fuerzas políticas y sociales como alternativa a cualquier medida que suponga racionalizar el gasto en farmacia suprimiendo prestaciones o cargando su coste al usuario.

Romay anunció que quiere fomentar su prescipción mediante acuerdos con los médicos, asi como regular la publicidad que estos reciben directamente de los laboratorios con sus visitadores médicos para que receten un determinado fármaco.

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Sobre la firma

Lucía Abellán
La redactora jefa de Internacional de EL PAÍS ha desarrollado casi toda su carrera profesional en este diario. Comenzó en 1999 en la sección de Economía, donde se especializó en mercado laboral y fiscalidad. Entre 2012 y 2018 fue corresponsal en Bruselas y posteriormente corresponsal diplomática adscrita a la sección de España.

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