Escritores y directores defienden en Santander un cine basado en la gran literatura europea

Arturo Pérez Reverte, que casi sin quererlo y un poco a regañadientes se ha ido convirtiendo en un guionista de éxito, afirmó ayer que la gran baza del cine europeo es beber del riquísimo capital literario del viejo continente, y conminó a los Jóvenes guionistas a "leer más a Balzac, Dumas y Stendhal, y menos a Paul Auster y Martin Amis". Varios escritores y directores reunidos en la Universidad Menéndez Pelayo de Santander se sumaron al alegato y criticaron la rendición de la narrativa fílmica española a los estereotipados modelos anglosajones.

Pese a que precisamente Paul Auster y Martin Amis son dos de sus narradores contemporáneos favoritos, el organizador del encuentro, Juan Cueto, estuvo de acuerdo con Pérez Reverte en que la gran cultura continental "es clave para la literatura, el cine y la televisión" en España y en el resto de Europa. El escritor y director Jesús García de Dueñas sumó a ello su apoyo.Arturo Pérez Reverte ha tenido ocasión últimamente de revisar los textos de un buen número de jóvenes guionistas, y asegura que se resienten de una gran pobreza expresiva, que les falta dominio de las técnicas narrativas y que "se les nota que han leído poco" .

El escritor critica además que muchos guiones del cine español reciente se inspiren en los modelos estadounidenses y señala: "El capital cultural europeo es tan rico que no necesitamos road movies". Y lo del "capital cultural" parece entenderlo Pérez Reverte en su más amplio sentido: "Podemos estar orgullosos de Puerto Hurraco", dice, "porque ésa es la manera española de matar".

Narración primitiva

Daniel Calparsoro, director y guionista de Salto al vacío y Pasajes -ésta última aún por estrenar- también arremetió contra la forma de narrar "estancada y primitiva" del cine español actual, que según él, utiliza un lenguaje formalista y de capa caída basado en las teleseries norteamericanas". Según Calparsoro, los nuevos guionistas deberían inspirarse en la estructura clásica de la novela para perderse en sus meandros y profundizar, más allá de las "estructuras lineales de 100 pesetas", en las situaciones y los personajes más evocadores e intensos.Gonzalo Suárez, director que sí ha explorado a menudo la narración clásica -su última película, Mi nombre es sombra, rebusca en los mitos populares creados por Stevenson- considera que "el cine español no puede tratar de ser realista". Suárez, partidario de una lectura subjetiva y "mítica" de los clásicos, considera que el realismo sale muy caro y requiere grandes despliegues técnicos. Cree, además, que es muy difícil en España encontrar actores con un estilo de interpretación naturalista.

Suárez explicó la carestía del realismo con un ejemplo. En una producción americana, dijo, es posible que un personaje entre en una sala de billar abarrotada de gente, pregunte "¿han visto a Joe?", le digan que no y se vaya, en concordancia con el más estricto realismo. "En una película española, sin embargo" concluye Suárez, "para que un productor acepte montar una sala de billar tiene que haber como mínimo un asesinato encima del tapete".

El seminario Escribiendo para el cine reúne esta semana en la Universidad Internacional, Menéndez Pelayo a guionistas, directores y productores para debatir sobre los guiones y las adaptaciones de novelas, un asunto considerado por muchos críticos un punto débil de la cinematografía española. Pérez Reverte, que ha visto llevada a la pantalla la mayor parte de su exitosa obra literaria, se declaró ayer "un escritor resignado" y dijo: "Cuando me compran los derechos de una novela, asumo que la película va a ser una mierda".

Y en alguna ocasión sus temores se han visto confirmados: La tabla de Flandes, dice en referencia a la adaptación de su novela, "es una película infame y abyecta, pero al menos ayudó a que el libro se siguiera vendiendo". Actualmente, y con mayor optimismo, Pérez Reverte está colaborando con el director Gerardo Herrero para llevar al cine Territorio comanche. Y junto con el director Enrique Urbizu ha finalizado el guión de El club Dumas que "ha quedado muy bien".