Carlo Rubbia discute en Aragón el desarrollo de su reactor nuclear limpio

El premio Nobel de Física Carlo Rubbia presentará mañana en Zaragoza el sistema ideado por él para. producir energía a partir de la fisión nuclear sin apenas residuos radiactivos de larga duración, denominado Amplificador de Energía (AE). La visita, por invitación del presidente del Gobierno autónomo de Aragón, Santiago Lanzuela, del PP, tiene por objetivo considerar la posibilidad de desarrollar e instalar en Aragón un prototipo.

Mañana mismo, a las seis de la tarde, Aznar recibirá en la Moncloa al físico italiano."En Zaragoza habrá primero una reunión de Rubbia con los poderes regionales (sindicatos partidos políticos y la Federación de Municipios de Aragón), y luego otra a la que han sido invitadas las empresas del sector energético nacional, como Repsol, Cepsa las eléctricas y Consejo de Seguridad Nuclear", explicó ayer Ignacio Dauden jefe de gabinete del Presidente del Gobierno autónomo. "Otros países y comunidades autónomas están interesadas en el amplificador de energía", continúa, "y Aragón quiere optar, pero antes hay que saber si se puede instalar aquí o no, y si hay apoyo por parte de las empresas".

Hasta ahora el equipo de Rubbia, con fuerte presencia de investigadores españoles, italianos y franceses, ha demostrado en el Laboratorio Europeo de Física de Partículas (CERN, junto a Ginebra) la viabilidad de la idea científica del AE, al comprobar que la ganancia energética es la prevista según los cálculos preliminares. También se está comprobando la capacidad de eliminación de residuos nucleares ajenos al sistema.

El AE utiliza un acelerador de partículas para bombardear con protones un blanco de plomo y producir energía a partir del torio, un elemento abundante en la naturaleza, prácticamente sin generar residuos radiactivos de larga duración. Los ensayos científicos se han hecho con una potencia de un vatio y el siguiente paso es comprobar, en un prototipo de instalación, la producción energética -centenaresde megavatios- con 20 o 30 toneladas de torio.

Para ello habría que construir un pequeño acelerador, de unos 15 o 20 metros, de longitud, y una cámara de unos seis metros de diámetro donde se ubica el blanco y el combustible de torio. El costo del laboratorio con el prototipo estaría en torno a los 20.000 millones de pesetas. Rubbia y su equipo han preparado ya un diseño conceptual pero queda por hacer un diseño detallado de ingeniería para una ubicación concreta y construirlo, lo que supondría unos cinco años.