La Casa de Cultura de Ciempozuelos, de Carlos Puente, gana el IBERFAD

La primera edición del Premio IBERFAD Alejandro de la Sota -que otorga la conocida entidad catalana Fomento de las Artes Decorativas (FAD)- ha recaído en la Casa de Cultura del pueblo madrileño de Ciempozuelos, diseñada por el arquitecto Carlos Puente Fernández. Esta es la primera vez, desde que en 1958 el FAD instituyó estos galardones, que se premian obras realizadas fuera de Cataluña ya que el ámbito general de los premios siempre ha sido catalán.El jurado de premio FAD -integrado por Norman Cinnamond, Gabriel Allende, Jaume Bach, Olga de la Cruz, Manuel Gausa, Nancy Robbins, Ton Salvadó y Eduardo Souto de Moura- valoró el edificio de Puente entre otros 11 finalistas por considerarlo, según explicó Cinnamond, "una obra fresca que cuando la ves provoca las ganas de continuar siendo arquitecto".

El Premio FAD de arquitectura 1996, que junto con los otros galardones se entregó ayer en Barcelona, se otorgó a la restauración y reforma del teatro Metropol de Tarragona, a cargo del arquitecto Josep Llinás y del aparejador Jaume Martí. Esta obra competía para el galardón con otras cuatro finalistas, entre las que destacaba el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (Macba), del estadounidense Richard Meler, que en apariencia salía como favorita. Norman Cinnamond, presidente del jurado, señaló ayer que estos premios "tienen que divulgar y dar a conocer la arquitectura a la gente, y el Macba ya es suficientemente conocido". En su opinión, el FAD tiene que lanzarse a una tarea de investigación para divulgar y promover la obras arquitectónicas que por ser menos conocidas corren el peligro de quedar relegadas. Cinnamond destacó la importante labor realizada por Llinàs en la rehabilitación del teatro, construido a principios de siglo por el arquitecto modernista Josep M. Jujol y que a lo largo de los años había sido modificado y mutilado.

El premio de interiorismo ha correspondido a la tienda Love Store de Barcelona, diseñada por Fernando Salas; el de espacios exteriores, a la primera fase de la reforma del paseo marítimo de la Barceloneta, a cargo de un equipo de jóvenes arquitectos, y el de espacios efímeros, al montaje realizado por Daniel Freixes para la exposición El Dublin de James Joyce, que se presentó en el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona. El jurado ha otorgado también una mención especial a Robert Brufau, arquitecto especialista en estructuras.