Dos años de 'cheque escolar' en Valencia
La fórmula municipal del PP costea económicamente sus gastos de enseñanzas en escuelas infantiles
Un total de 497 millones de pesetas invertirá el Ayuntamiento de Valencia en cheques escolares en el curso 1995-96. En el ejercicio pasado, fueron 498 los millones destinados a esta modalidad de subvención. El cheque escolar, que cumple su tercer año durante el curso 1995-96, es cada vez más conocido entre las familias de Valencia. Si en el ejercicio 1994-95 fueron solicitados 8.004 cheques, en el de 1995-96 esta cifra a aumentado hasta 9.676 solicitudes. Sin embargo, el número de cheques concedidos por el Ayuntamiento ha disminuido (4.436 en el curso 1994-95 y 4.070 en el actual) debido a restricciones presupuestarias.
Por medio del cheque escolar el Ayuntamiento financia exclusivamente la enseñanza en escuelas infantiles- a las familias de menores ingresos. La comida y las actividades complementarias, así como cualquier otro sobrecoste corren a cargo de los padres. En Valencia, hay alrededor de 25.000 niños de entre cero y cuatro años de edad y, por tanto, posibles usuarios del cheque escolar. Los 4.070 niños beneficiados en este curso no llegan, así, a la quinta parte.
Los sectores más modestos
"Estoy convencido de que mucha gente que no podría tener acceso a una guardería y dejaría a sus hijos, por ejemplo, con la abuela ha podido mandar a sus hijos a guarderías gracias al cheque escolar", afirma el concejal de Educación, Fernando Coquillat, del PP. "El cheque escolar permite a los sectores sociales más modestos llevar a sus hijos a guarderías; algo que no podrían hacer si no fuera por el cheque escolar", agrega el concejal.Las clases sociales más modestas de la ciudad han accedido paulatinamente a esta modalidad de pago, de manera que mucha gente de clase media no se ha podido beneficar del cheque escolar porque sus ingresos superan el máximo marcado para concederlo. Así, una familia que tenga tres hijos si ingresa por su trabajo poco más de 1,8 millones de pesetas no recibirá en el curso 1995-1996 el cheque escolar. En el cursó pasado, en cambio, esta misma familia sí lo hubiera obtenido, ya que el tope máximo era de 2,1 millones. El concejal Coquillat recalca este dato como una muestra de que muchas personas con escasos ingresos, que en el curso 1994-95 no pidieron el cheque escolar, sí que lo han solicitado este curso. Es ésta la razón, según el edil, de que cada vez el tope de ingresos económicos sea más bajo. También influye el hecho de que este curso el Ayuntamiento de Valencia haya concedido 366 cheques escolares menos que en el ejercicio 1994-1995.
El importe máximo del cheque es en este curso de 13.455 pesetas mensuales. Es decir, un total de 134.550 pesetas, ya que el Ayuntamiento paga el cheque durante 10 meses. El importe medio mensual que recibe cada familia es de 11.410 pesetas.
Los beneficiados por el cheque escolar son aquéllos que tienen menos ingresos, aunque también se prima a niños con minusvalías o que tengan padres o hermanos afectados por esta situación. Los hijos de parados constituyen otro de los grupos a los que el Ayuntamiento prima en la obtención del cheque escolar. Curiosamente, el gobierno municipal del PP tiene- previsto retirar el próximo curso una cláusula que incluía en el sistema a los niños superdotados. Coquillat señala que en el curso 1994-95 sólo hubo tres solicitudes de niños superdotados y que en éste no hubo ninguna.
"Ha sido un fracaso"
El concejal del PSOE de Valencia Vicent Soler considera que el cheque escolar "ha sido un fracaso". "El gobierno municipal lo ha hecho a costa de desmantelar una red pública de escuelas infantiles que tenía garantizada un mínimo de calidad. Ahora, en cambio, hay un saco de dinero que, de manera graciosa y arbitraria, va a entidades privadas con ánimo de lucro", señala Soller. El procedimiento por el que se selecciona a los beneficiarios también merece sus críticas. "Los baremos no son nada objetivos. Muchas familias sin necesidades económicas se han visto beneficiadas a costa de aquellas otras que lo necesitaban", manifiesta el concejal del PSOE. Soler, además, recuerda que el cheque escolar impide el libre acceso a los centros educativos más caros. "Hay muchas escuelas infantiles que salen por más de 50.000 pesetas al mes contando la comida y las actividades complementarias".La introducción del cheque escolar en 1994 vino acompañada de una fuerte polémica en la ciudad. La entonces concejal de Educación, la regionalista de Unión Valenciana Dolores García Broch, financió el cheque escolar con el dinero destinado a subvencionar a 24 escuelas infantiles. La inversión municipal en el año en que se puso en marcha fue de 293 millones. Esto motivó la protesta de los profesores y las familias que llevaban a sus hijos a los 24 centros educativos que se quedaron, de la noche a la mañana, sin su subvención.
El 100% de la enseñanza
La escuela infantil San Juan Bosco, situada en el popular barrio de Tendetes, es un ejemplo del funcionamiento del cheque escolar. Presta servicio a 98 niños de entre cero y cuatro años de edad. De ellos, 26 se benefician del cheque. El coste mensual de la enseñanza en esta escuela es de 9.000 pesetas mensuales. De esta manera, las 26 familias reciben una subvención que costea al 100% los estudios de sus hijos. San Juan Bosco cuenta con cuatro educadoras y una auxiliar."A mí el cheque escolar me ha venido muy bien. Es una experiencia positiva aunque para conseguirlo hay que hacer mucho papeleo", explica María del Carmen Durán, que trabaja como limpiadora y tiene un hijo de tres años en San Juan Bosco. "'Los colegios también debieran ser gratuitos", añade Durán. Vicente Galindo, un soldador en paro con un hijo en esta escuelas infantil, hace una petición: "Que no quiten el cheque escolar". El único defecto que ve Galindo en esta modalidad de subvención es que, "a veces, hay que hacer demasiados viajes al Ayuntamiento" para tramitarlo.
Jaime Serra, un pintor en paro, es tajante: "Si no fuera por el cheque, mí chiquilla estaría en casa. Hay que contribuir. Hoy por ti; mañana por mí".
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