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El Gobierno de Angola y UNITA piden la presencia de 'cascos azules'

La gravísima situación militar, económica y social producida por el recrudecimiento de los ataques de los rebeldes de la UNITA (Unión Nacional para la Independencia Total de Angola) contra ciudades y centros económicos vitales del país tras el fracaso de las negociaciones de Abiyán puede llevar a una intervención militar internacional en el país africano, quizás con el envío de cascos azules, como ha pedido el presidente electo José Eduardo Dos Santos. El ministro de información de UNITA también apoyó ayer, en Bruselas, el despliegue de tropas de paz de las Naciones Unidas."La paz aún es posible. Las negociaciones de paz bajo la égida de la ONU en Abiyán no han sido rotas, sino suspendidas", declaró Jorge Valentim, ministro de información de UNITA, quien explicó que sería necesaria la presencia de cascos azules en Angola para garantizar el cumplimiento de cualquier acuerdo.

Entretanto, la guerra sigue. Según la radio nacional angoleña, 15 personas murieron ayer en la ciudad de Kuito, rodeada por UNITA, y al menos 30 resultaron heridas a consecuencia de un bombardeo rebelde.

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