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El objetivo es lograr un acuerdo compatible con la PAC, dice Delors

Lluís Bassets

"El objetivo de las conversaciones de Washington es obtener un acuerdo compatible con. la nueva política agrícola común (PAC)", señaló ayer el presidente de la Comisión Europea, Jacques Delors, ante el Pleno del Parlamento Europeo (PE). La Cámara europea votará hoy una resolución sobre las negociaciones del GATT, en la que se condenan las sanciones norteamericanas y se propugna "un compromiso equilibrado y equitativo". La resolución dice que "la reforma de la PAC debería y podría constituir la base de un acuerdo en el seno del GATT", pero considera que "es difícil prever exactamente" en qué medida quedarán reducidas las exportaciones europeas subvencionadas como resultado de la reforma.

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La evaluación de las consecuencias de la nueva PAC para las exportaciones de cereales es uno de los puntos centrales de la actual negociación. Ninguna institución europea había puesto hasta ahora el dedo en la llaga como lo hace la resolución del Parlamento Europeo: "es difícil prever exactamente [las consecuencias de la PAC sobre las exportaciones subvencionadas], pero estarán cerca desde el punto de vista presupuestario y del volumen de las propuestas actuales que pueden llevar al compromiso". Francia considera, en cambio, que la nueva PAC no deja margen para el compromiso con Washington. Y la Comisión Europea, encabezada por sus dos negociadores, los comisarios Frans Andriessen y Ray McSharry, considera que no hay incompatibilidad.El presidente de la Comisión, Jacques Delors, comparte esta posición, cuando menos formalmente. Ayer, en su intervención ante los europarlamentarios, aseguró que el colegio de comisarios no iba a entrar en votaciones sobre el acuerdo que se pueda obtener en Washington. La explicación de Delors es escueta y contundente: "El Consejo de Ministros dio un mandato a la Comisión, colegio de comisarios que delegó en dos personas la realización dé la negociación. Todos, dimos nuestra confianza a los dos comisarlos y no hay lugar por tanto a una votación dentro de la Comisión".

Delors condenó, una vez más, las sanciones unilaterales por valor de 300 millones de dólares, decretadas por Washington con efecto a partir del 5 de diciembre próximo. Subrayó la necesidad de que "la globalidad de la negociación sea asegurada", en referencia a la liberalización por parte de Estados Unidos del mercado de servicios y a un mejor acceso a los mercados. Y repitió los términos de la nota del Consejo de Ministros de la CE, en la que se habla de "espiral de medidas de retorsión" y se sugieren aranceles de castigo como respuesta de los países europeos, en caso de que Estados Unidos ponga en práctica sus amenazas.

Salvar la presidencia

El secretario de Estado para Europa británico, Tristan Garel-Jones, por su parte, se limitó a subrayar que la responsabilidad de obtener un acuerdo con Estados Unidos es de la Comisión. "La Comisión tiene la competencia para la negociación y espero que lo haga con determinación", dijo. Para el Reino Unido la obtención de un acuerdo en el GATT sería una baza suficiente como para justificar su presidencia semestral de la Comunidad, caracterizada precisamente por su esterilidad, el ensimismamiento británico en sus propios problemas domésticos y las dificultades con que ha tropezado la construcción europea.

El secretario de Estado para Europa, Carlos Westendorp, por su parte, aseguró ayer que la obtención de un acuerdo en el GATT y un buen resultado en el Consejo Europeo de Edimburgo son "la condición necesaria, pero no suficiente, para que las cosas empiecen a ir mejor". Westendorp, que se reunió con los parlamentarios europeos españoles para explicarles la situación del Paquete Delors II operspectivas financieras de la CE, también considera que la Comisión no puede desbordar la nueva PAC. "Un acuerdo en el GATT sería un balón de oxígeno", dijo.

"Si hay extralimitación, otros países, además de Francia, pueden plantear problemas", aseguró. Y añadió: "La necesidad del acuerdo es muy grande". El secretario de Estado se mostró confiado "en que los Estados Unidos cederán en todos los otros campos, una vez asegurado el acuerdo agrícola". Según Westendorp la nueva Administración norteamericana, con presidente y parlamento del mismo color político, no debería empezar con un tema tan duro. "El momento adecuado es ahora", subrayó.

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Sobre la firma

Lluís Bassets
Escribe en EL PAÍS columnas y análisis sobre política, especialmente internacional. Ha escrito, entre otros, ‘El año de la Revolución' (Taurus), sobre las revueltas árabes, ‘La gran vergüenza. Ascenso y caída del mito de Jordi Pujol’ (Península) y un dietario pandémico y confinado con el título de ‘Les ciutats interiors’ (Galaxia Gutemberg).

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