_
_
_
_
_

Economía y responsabilidades

¿En qué medida los alemanes están dispuestos a aceptar las responsabilidades internacionales que les da una economía superpotente? La pregunta, obsesiva desde hace dos años, se plantea en cada reunión de los países más industrializados. La respuesta, o por lo menos una indicación, podría venir de la huelga de servicios públicos que comenzó el lunes 27 de abril en Alemania. Una huelga en la que la postura internacional es tan importante como la postura interna. Estados Unidos, Francia y el Reino Unido reprochan a Alemania el nivel excesivo de sus tasas de interés, tasas establecidas por el Bundesbank. (...)Las consecuencias de tal política son muy negativas. Los responsables de los países más industrializados son conscientes de que la reunificación alemana tiene un coste importante y que la enormidad de los capitales necesarios provoca tensiones inflacionistas. Pero reprochan a los alemanes el llevar una política solamente monetaria. Si la política presupuestaria fuese más estricta del otro lado del Rhin, es decir, si Kohl recurriera más a los impuestos y menos a los préstamos, si cortase ciertas subvenciones para enlentecer el crecimiento del gasto público; en resumen, si dijese la verdad a sus conciudadanos, el déficit de las finanzas públicas no alcanzaría los 110.000 millones de marcos y el banco central habría podido moderar la elevación de sus tasas. (...)

27 de abril

Cuando un tema da mucho que hablar, lee todo lo que haya que decir.
Suscríbete aquí

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_