El Gobierno vulnera la ley del Instituto Cervantes al demorar la designación del director

JORDI BUSQUETS, Un mes después de haberse agotado el plazo fijado en la ley de creación del Instituto Cervantes, todavía se desconoce cuándo será nombrado su director, decisión que compete al Gobierno. En los contactos que representantes de la Administración han mantenido con distintos candidatos a la dirección, el rango político-administrativo que la ley otorga a este cargo ha resultado un escollo insalvable. En medios socialistas se observa ahora como "un error" que el mencionado cargo tenga un rango inferior al de secretario de Estado. El consejo de administración del instituto ya se ha constituido y ha celebrado dos reuniones. Su presidente es el secretario de Estado para la Cooperación Internacional, Inocencio Arias.

La designación del director resulta imprescindible para la puesta en marcha del Instituto Cervantes, órgano para la promoción y enseñanza del castellano en el extranjero. La ley de creación del instituto fue aprobada por la Cortes el pasado 7 marzo y entró en vigor 16 días después al publicarse en el Boletín Oficial del Estado (BOE).El Instituto Cervantes estará regido, según la ley, por un patronato, un consejo de administración y un director. La norma no precisa en qué fecha debe constituirse el patronato. El consejo de administración, en cambio, debía constituirse (y ya ha sido creado) en los tres meses siguientes a la entrada vigor de la ley, plazo que Finalizó el pasado 23 de junio y en el que también debía haber sido designado el director, cargo que aún sigue vacante.

Político e intelectual

Las dificultades con que se enfrentan los representantes de la Administración para encontrar un director, se deben a que el rango político-administrativo que la ley otorga a este cargo resulta "poco atrayente", según reconocen las fuentes informantes, para una persona que reúna las características exigidas por el Gobierno: "Se piensa en alguien con reconocido prestigio político e intelectual, que tenga, además; buenas y amplias relaciones internacionales". Un perfil en el que encaja como anillo al dedo Fernando Morán, ex ministro titular de la cartera de Asuntos Exteriores en el primer Gobierno socialista. Morán, según las fuentes informantes, no ha rechazado el ofrecimiento, pero, por el momento, tampoco lo ha aceptado.

La ley no precisa qué categoría político-administrativa tendrá el cargo de director del Instituto Cervantes, pero, en tanto que miembro del consejo de administración, siempre será inferior al del presidente del órgano rector, puesto que es ocupado por un secretario de Estado. Fuentes socialistas reconocen que la categoría que se otorga en la ley al director constituye "un obstáculo" para que alguna de las personas que responden al perfil requerido por el Gobierno acepte el cargo. Las mismas fuentes señalaron, en cualquier caso, que la relevancia del director del Instituto Cervantes no vendrá dada tanto por su rango administrativo como por la personalidad y actuación de la persona que ocupe la plaza.

El consejo de administración está presidido, en concreto, por el secretario de Estado para la Cooperación Internacional y para Iberoamérica del Ministerio de Asuntos Exteriores, Inocencio Arias, que tiene como vicepresidentes a los subsecretarios de los ministerios de Educación y de Cultura.

La aprobación del reglamento ha culminado los trabajos previos a la puesta en marcha del instituto y abrirá un nuevo plazo de tres meses, según la ley, durante el cual deberá constituirse el patronato, órgano rector en el que, junto al Rey, el presidente del Gobierno y varios ministros, se sentarán 25 representantes de la cultura de la comunidad hispanohablante.

De momento, 40 centros culturales españoles en el extranjero, dependientes de los ministerios de Trabajo y Seguridad Social, y de Educación y Ciencia y Asuntos Exteriores, se han incorporado al Instituto Cervantes, bajo el control de Asuntos Exteriores. Veintiuna de esas sedes están en localidades europeas, 12 en países africanos, seis en Asia y una en Estados Unidos. Asuntos Exteriores se hace cargo, hasta septiembre, de la seguridad social de los trabajadores de dichos centros.

En cuanto a la sede central, desde el principio se habló, como cuna de Miguel de Cervantes, de la conveniencia de instalarla en Alcalá de Henares, provisionalmente en el Colegio del Rey y de modo definitivo en el Cuartel de Sementales, en el plazo de unos dos años, una vez abandonado por el Ejército y acometidas las obras de remodelación. El 23 de abril, con ocasión de la entrega del Premio Cervantes, el ministro de Cultura, Jordi Solé Tura, confirmó las posibilidades de la ciudad complutense.

El Grupo Parlamentario Popular preguntó recientemente al Senado "las razones por las que el Gobierno no ha nombrado los cargos previstos".