Periodistas extranjeros comprueban que el Gobierno de Bagdad controla Kirkuk
Las autoridades íraquíes llevaron ayer a un grupo de periodistas extranjeros a la ciudad de Kirkuk para demostrar al mundo que el centro petrolífero está bajo su control, y no en manos de los rebeldes kurdos, como afirma la oposición en el exilio. "Hemos recorrido la ciudad lo suficiente como para poder afirmar con cierta confianza que las fuerzas gubernamentales tienen ahora, de nuevo, el control de Kirkuk", afirmó Edward Stourton, reportero de la cadena británica Independent Television News (ITN).
Las imágenes de la ITN, como las de la norteamericana Cable News Network (CNN) muestran diversos edificios destruidos a causa de los enfrentamientos entre el ejército y los rebeldes. En las calles aparecen aún los cuerpos sin vida de algunos de los caídos en la lucha, además de vehículos militares y civiles quemados.Sin embargo, los insurgentes continuaban anoche denunciando que los sangrientos combates han obligado al éxodo masivo de civiles que huyen hacia las montañas. "Estamos sufriendo una lluvia de fuego", dijo un portavoz kurdo.
Los rebeldes capturaron Kirkuk, la cuarta ciudad de Irak, a mediados de marzo, pero el pasado jueves el Gobierno anunció que había vuelto a tomar el control de la ciudad. Los periodistas dijeron que durante su recorrido no pudieron escuchar tiros o signos de que la resistencia esté combatiendo ni tan siquiera a las puertas de la ciudad. Señalaron, sin embargo, que las calles de Kirkuk estaban virtualmente tomadas por el ejército y que en el trayecto desde Bagdad a esa ciudad vieron circular a numerosos vehículos de transporte de tropas.
Según el gobernador provincial, Hashim Hasan al Majid, en los combates hubo pocas víctimas porque los rebeldes fueron derrotados en cuestión de horas. "Después de un corto combate, salieron corriendo y abandonaron la ciudad huyendo como ratas", dijo Al Majid. Otras autoridades iraquíes han reconocido que Klrkuk estuvo en manos de los rebeldes durante seis días.
Stourton indicó que los cuerpos que había en las calles estaban tan abrasados y destrozados que era imposible decir si pertenecían a guerrilleros, a civiles o a militares leales al Gobierno.
Los textos de las informaciones de los periodistas, que pasaron por la censura previa a que obligan las autoridades iraquíes, indicaban que los rebeldes han sido expulsados a unos 50 kilómetros de Kirkuk y que el Gobierno confía en poder liberar en los próximos días todo el territorío norte de Irak, habitado mayoritariamente por kurdos y en donde se ha producido la revuelta.
La cadena de televisión francesa TF1, que filmó varias filas de cadáveres apila.dos a la entrada de Kirkuk, indicó que sólo pudo ver dos pozos de petróleo destruidos.
Desde el lado rebelde, los diversos grupos kurdos que combaten al ejército iraquí en el norte también tratan de organizar viajes a las zonas bajo su control para los reporteros.
La complejidad de estas excursiones, que partiendo de Turquía se adentran en las montañas kurdas, hace que sean pocos los que se aventuren y que sus informaciones lleguen con bastante retraso.
Por otra parte, el Gobierno irani presentó ayer al energado de negocios de Irak en Teherán, Fajri Hamoud al Dulalmi, una protesta por el tratamiento que reciben los shiíes en Irak y pidió permiso para que una delegación irani visite al nonagenario y venerado ayatolá Abolqasem al Koi.
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