Los ganaderos cántabros seguirán las movilizaciones y el bloqueo de las entregas de leche

Por el exiguo margen de 57 votos, más de 3.300 ganaderos convocados por las cooperativas y los sindicatos decidieron ayer iniciar nuevas movilizaciones y abstenerse de llevar la leche a las empresas. Con esta decisión se prolonga un conflicto que dura ya varios meses con el balance de numerosos enfrentamientos.El recuento se prolongó durante horas y terminó a media tarde con este resultado: de los 3.327 participantes, 1.692 se declararon partidarios de no abastecer a las industrias y volver a las movilizaciones en tanto que otros 1.635 optaban por entregar la leche y dialogar. Las empresas exigían tres días de paz en el campo como condición para sentarse a negociar todas las reivindicaciones planteadas por los ganaderos, excepto el precio de mercado que siempre se han negado a considerar con el pretexto de que su elevación les restaría competítividad.

Por su parte, las industrias que compran leche de vaca en Galicia y los ganaderos de la Asociación Agraria-Jóvenes Agricultores han inciado negociaciones para la fijación de unos nuevos precios de la leche que se aplicarán en los próximos meses. Con estas conversaciones se daría cumplimiento del laudo de Agricultura por el que se disponía el establecimiento de mesas regionales en el sector lácteo. En contra de lo que sucede en otras zonas del norte, las relaciones en el sector lácteo en Galicia entre ganaderos y las industrias se rigen por el contrato homologado firmado la pasada campaña y donde el grupo Larsa era el principal protagonista.

Comisión mixta

En base a ese contrato, funcionó una comisión mixta de seguimiento que se ha encargado durante este período de que industriales y ganaderos cumplieran sus compromisos. Por incumplimiento de contratos, una industria hubo de hacer liquidaciones complementarias de 14 millones de pesetas a los productores. Igualmente se han impuesto sanciones a ganaderos por no cumplir sus contratos.

El objetivo de los representantes agrarios es dar un paso más sobre el contrato del año anterior. Se trata de lograr un convenio colectivo que obligue a todas la industrias que operan en la comunidad gallega. Los ganaderos parten de un precio mínimo de 46 pesetas más las primas por calidad. En realidad, los precios a percibir por los agricultores se situarían en unas 50 pesetas.

En Asturias, se produjeron ayer incidentes en la zona oriental, donde grupos de ganaderos desparramaron la leche de algunas cisternas. La Guardia Civil practicó cinco detenciones.