La sombra del narcotráfico

Estados Unidos expresó el pasado viernes su confianza en que el golpe militar que derribó al dictador de Paraguay Alfredo Stroessner sea un paso hacia la democracia, pero funcionarios norteamericanos expresaron su preocupación por los informes que ligan al nuevo hombrefuerte, el general Andrés Rodríguez, con el tráfico de drogas.John Hoyt Williams, profesor de Historia de América Latina en la universidad de Indiana aseguró que Rodríguez tiene una reputación "realmente mala" "Ha estado implicado una y otra vez", añadió, "por Estados Unidos y las organizaciones internacionales que tratan sobre el problema de la droga como una clave en el narcotráfico. Rodríguez, supuestamente, ha facilitado protección, campos de aterrizaje y servicios de aerotaxis a gente que efectuaba contrabando de drogas hacia el Norte. Esto es una alegación, pero es de conocí miento general en las calles de Paraguay, y he leído sobre ello en numerosas ocasiones en informes publicados por organizaciones de investigación".

Según Williams, se considera que Rodríguez prestó protección y asistencia a Auguste Ricord, traficante francés de heroína que fue deportado a Estados Unidos y devuelto a Paraguay en 1983 tras ser liberado de una prisión norteamericana.

Oficiales implicados

Marlin Fitzwater, portavoz de la Casa Blanca, y su homólogo en el Departamento de Estado, Charles Redman, declinaron comentar las informaciones que relacionan al nuevo presidente paraguayo con el narcotráfico, pero otro funcionario norteamericano dijo que en 1985 la agencia antidroga de Estados Unidos (DEA) recibió un documento de la polícia antinarcóticos de Paraguay en el que se identificaba al general como un traficante de drogas. En 1985, The New York Times informó que funcionarios norteamericanos sospechaban que oficiales paraguayos de alta graduación estaban involucrados en el narcotráfico. El viernes, fuentes similares aseguraron que Rodríguez era uno de los jefes milita res sobre los que existían tale sospechas.

Paraguay es un importante productor de marihuana, y ex porta la mayor parte de su producción a Brasil. Funcionarias estadounidenses creen que grandes cantidades de cocaína se producen o circulan a través de Paraguay.

En su informe anual, el De partamento de Estado aseguraba en 1988 que aparentemente el país latinoamericano se ha convertido en un significativo lugar de inversión de los beneficios del narcotráfico, debido a los relajados controles del Gobierno de Asunción. Dinero extranjero procedente de estas actividades ilegales se emplea supuestamente para comprar tierras y otras propiedades en Paraguay.

En 1984, los servicios aduaneros paraguayos confiscaron unos 200.000 litros de productos químicos necesarios para la fabricación de cocaína, pero las autoridades de Asunción hicieron oídos sordos a las repetidas peticiones de Washington de destruir la mercancía.