Sajarov anuncia que podrá viajar a Estados Unidos

El profesor Andrei Sajarov, la conciencia crítica del régimen soviético durante más de dos décadas, viajará a EE UU el próximo noviembre tras haber sido levantada la prohibición de salir al extranjero que aún pesaba contra él como último resto de la persecución sufrida por el científico por su intransigente defensa de los derechos humanos. En una conferencia de prensa celebrada ayer, Sajarov, de 67 años, anunció que tomará parte en la reunión del consejo directivo del Fondo Internacional para la Subsistencia y Desarrollo de la Humanidad en Washington.

Sajarov, uno de los padres de la bomba de hidrógeno soviética, fue elegido miembro del Presidium de la Academia de Ciencias de la URSS el jueves pasado, lo que supone un reconocimiento de sus méritos profesionales, en el curso de la campaña de renovación y rejuvenecimiento de la academia actualmente en marcha.Sajarov, que consiguió el Premio Nobel de la Paz en 1975, fue exiliado a la ciudad rusa de Gorki, junto al Volga, en 1979. Su destierro fue acompañado de una campaña policial de desprestigio y calumnia dirigida contra él y contra Elena Bonner, su esposa, que pasó seis meses en Occidente, a partir de diciembre 1985.

El científico nunca dejó de ser miembro de la Academia de Ciencias, donde ingresó con la edad récord de 32 años, pese a que durante su estancia en Gorki se vio desposeído de varias condecoraciones, incluida la orden de Lenin. El destierro en Gorki concluyó en diciembre de 1986 tras una llamada de Mijail Gorbachov por un teléfono recién instalado. Su vuelta por tren a Moscú, en vísperas de Navidad, marco un punto de inflexión para la credibilidad del líder soviético en Occidente y supuso el inicio de un proceso de liberación de prisioneros políticos en la URSS.

A principios del pasado junio, en una conferencia de prensa organizada por el Ministerio de Exteriores de la URSS, Sajarov denunciaba la existencia de 20 prisioneros políticos en las cárceles de su país. Algunas de las personas mencionadas entonces han sido, mientras tanto, puestas en libertad. En junio también, el científico criticaba la invasión de Checoslovaquia por las tropas del Pacto de Varsovia en 1968 y pedía que se investigaran las relaciones entre el Comité Estatal de Seguridad (KGB) y el terrorismo internacional en un libro que, bajo el título de No hay otro camino, apareció en la URSS en vísperas de la conferencia del PCUS.

Actualmente, Sajarov, que publica artículos y da entrevistas en los medios de comunicación soviéticos, es miembro de la dirección del movimiento Memorial, entre cuyos fines está la erección de un monumento a las víctimas del estalinismo.

A mediados de este mes de octubre, Sajarov opinó que las reformas en la URSS están amenazadas por los políticos de "extrema derecha". El mes anterior, Sajarov había calificado a Egor Ligachov como "una fuerza muy peligrosa y reaccionaria". "En concreto muy poco ha cambiado. Esto supone que el viejo aparato que ha mantenido el poder durante décadas está impidiendo el cambio y no cede su poder. Y lo que es peor, está intentando lanzar un contraataque", afirmaba Sajarov a un periódico estoniano.

El seminario de Barcelona

Sajarov está invitado a participar en un seminario sobre la perestroika que se celebrará en Barcelona del 25 al 29 de octubre próximo. Elena Bonner manifestó ayer a esta corresponsal que el científico, desbordado de invitaciones, no tiene tiempo de preparar los papeles para acudir a España."Nunca ha habido obstáculos para que viajara al extranjero", señalaba Bonner, asegurando que su esposo siempre ha mantenido la misma postura. El propio Sajarov dijo ayer que había proporcionado una clave a Gorbachov para sortear los obstáculos que impedían su salida al extranjero en nombre de los "secretos de Estado" de los cuales se le supone poseedor en tanto que miembros del equipo nuclear soviético.