El PC chileno llama a un "levantamiento" tras el plebiscito

El número dos del Partido Comunista Chileno, Volodia Teitelboim, que regresó esta semana al país tras ser levantado el exilio, preconizó ayer un "levantamiento popular" para defender el voto en el plebiscito del próximo 5 de octubre. En una conferencia de prensa, el ex senador, de 72 años y miembro de la comisión política del partido, dijo que todas las encuestas muestran una mayoría favorable al no, por lo que si gana el sí sería "el triunfo de una impostura, de un fraude, porque en Chile el sí racionalmente no puede ganar".

Expresó Teitelboim que puede ocurrir que el 5 de octubre el no triunfe, pero sea declarado perdedor. En ese caso, "el elector debe no sólo emitir su voto, sino también defender la victoria". "Yo creo en el pueblo en la calle", dijo, "como salió en Filipinas y en otros países" y mencionó expresamente un "levantamiento popular".Las declaraciones de Teitelboim contrastaron abiertamente con las expresiones del portavoz del Comando del No y presidente del Partido Demócrata Cristiano, Patricio Aylwin, quien afirmó que "impulsar la violencia, en cualquier hipótesis, es llevar al pueblo al matadero". Aylwin anunció, además, la creación de una coalición de centro, formada por seis partidos, "para ofrecer una alternativa de Gobierno para, Chile" después del eventual triunfo del no. "Estamos de acuerdo para designar, en el momento oportuno, un candidato común a la presidencia de la República", dijo Aylwin. Los seis partidos son, además de la democracia cristiana, el partido Radical, la Socialdemocracia, la Unión Socialista Popular, el partido Liberal y el Democrático Nacional.

Aylwin dijo que, si triunfa el no, la oposición intentará negociar con las Fuerzas Armadas una reforma de la Constitución. Teitelboim, por su parte, aseguró que dejar a Pinochet un año más en el poder, como establece la Constitución en el caso de ser derrotado, "sería como dejar al gato encargado de la carnicería. Tendría un año más para organizar un golpe de Estado".

Teitelboim preconizó, si triunfa el no, la formación de "un Gobierno provisional con todas las fuerzas opositoras y convocar a elecciones".

Entretanto, grupos de opositores chilenos iniciaron ayer simultáneamente en Arica, situada a 2.000 kilómetros al norte de Santiago, y Puerto Montt, a 1.000 kilómetros al sur de la capital, la llamada marcha de la alegría, que recorrerá 3.000 kilómetros a lo largo de Chile para difundir el mensaje del no en el plebiscito del 5 de octubre.

La marcha de la alegría tiene previsto recorrer 54 ciudades con mítines y actos de propaganda del no y concluirá el 1 de octubre en Santiago, donde cinco columnas de partidarios del no llegarán desde diferentes puntos.

La batalla de la televisión continuó ayer con un nuevo golpe opositor. Sofia Prats, hija del anterior jefe del Ejército chileno, el general Carlos Prats, asesinado junto con su esposa el 30 de septiembre de 1974 en Buenos Aires, denunció en el espacio de propaganda electoral del no que la DINA (policía política de los primeros años del régimen) fue la ejecutora del crimen. Dijo Sofía: "No tenemos odio, ni afán de venganza, pero creemos que el prestigio del Ejército no se recuperará mientras estos crímenes no se aclaren".