_
_
_
_
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

¡Ave, Solchaga!

Pues sí, señor ministro, este colectivo de militares de la II República (con un promedio de 75 años) le saluda, pero con tristeza y frustración de no ver satisfechas sus justas reivindicaciones; aunque, paradójicamente, me siento optimista al respecto. Me explico:Según han ido sucediéndose los hechos en torno a la resolución de este contencioso, se desprende claramente que para este Ejecutivo socialista que nos gobierna el único inconveniente es el aspecto económico, por lo que la solución, aunque sea siniestra, se ve venir de la siguiente forma.

La Ley 37/1984 concedió a los. militares de la República que ingresaron durante la contienda una pensión mínima (que yo denomino limosna republicana) a partir del año 1985, pero con tales incompatibilidades que sólo la percibió una modesta parte de los afectados. Dos años más tarde, y cuando ya habían fallecido una buena parte de los posibles afectados, fueron suprimidas dichas incompatibilidades, pero eso sí, sólo a partir de 1987. Es decir, que con los mismos fondos más o menos, habida cuenta de las bajas, comenzó a beneficiarse cuando se hayan producido más fallecimientos, no me extrañaría que satisfagan los atrasos a los que no lo hicieron por la incompatibilididad entre 1985 y 1987, ya que al quedar menos beneficiarios se haría con la misma cantidad que se destinó para ello inicialmente. También es posible que más adelante, cuando se produzcan más fallecimientos, se reconozca a los afectados la categoría militar que cada uno tenía al acabar aquella triste e inútil guerra civil. Y finalmente, al morir otros cuantos, y teniendo en cuenta que por el mismo motivo de las bajas habidas no habrá necesidad de aumentar el presupuesto para ello, es muy probable que sean reconocidos de pleno todos los derechos del colectivo con el grado que cada uno hubiera obtenido de haber seguido en activo. O sea, que, como en aquella maldita guerra motivo de tanto desastre, lo que hay que hacer es resistir-

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_