Los precios al consumo bajaron un 0,3% en abril por el fuerte descenso de los alimentos

La entrada de frutas frescas de estación ha impedido que subiera en abril el índice de precios al consumo (IPC). La bajada de este indicador de la inflación en un 0,3%, según los dados publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), se ha debido a que la alimentación recortó el susto dado en marzo y se abarató en promedio el 1,7%. La subida acumulada en los cuatro primeros meses del año queda así en el 11,3%, tasa que en la Comunidad Europea (CE) sólo superan tres de los 12 países. Mientras el Gobierno volvió a Insistir en que el objetivo del 3% se puede conseguir a final de año, otras voces de la Administración, los sindicatos y la patronal se mostraron menos optimistas aun cuando la bajada de las gasolinas recortará varias décimas el índice en los próximos meses.

GUSTAVO MATÍAS, El abaratamiento medio de los productos agrarios, causantes principales de que el IPC de marzo subiera un 0,7% y colocara el aumento, del primer trimestre en el 1,6% -tasa solo superada en la CE por Grecia y Portugal-, ha restado casi 0,6 puntos al índice de abril. Sin alimentación, los precios habrían vuelto a subir cerca del 0,4%; en lo que va de año el resto de los productos, inás significativos para medir la inflación subyacente, se ha encarecido un 2,4%, de forma que su tasa anual (subida en los 12 últimos meses) sigue en el 5,3%.Se ha repetido el esquema observado desde hace más de un año: los alimentos tiran hacia abajo del índice, excepto en los meses de grandes distorsiones de la demanda (como en el verano, por el turismo), mientras que los productos industriales, y sobre todo los servicios, mantienen tensos sus precios. Los alimentos rio elaborados bajaron en abril im 3,6%, en tanto que los bienes industriales subieron el 0,2%, los cte consumo duradero el 0,1% y los servicios aumentaron el 0,6%, hasta alcanzar una tasa del 7,5%.

Dentro de los alimentos, que en los 12 últimos meses sólo han subido el 1,1%, el descenso del 12,6% observado por el INE en las frutas frescas -por la entrada de productos de estación a precios moderados gracias a las buenas cosechas- basta por sí solo para explicar todo el descenso del IPC. Pero la baja del 19,50% en la carne de ave y del 5,5% en las hortalizas han compensado todas las demás subidas de precios, a juzgar por las ponderaciones de Estadística.

Los demás grupos

En los demás grupos clásicos del IPC, el vestido subió un 0,5%, la vivienda el 0,3%, el menaje un 0,2% la medicina el 0,8%, los transportes el 0,2% (casi exclusivamente por la revisión de tarifas en el transporte público urbano), la cultura el 0,3%, y otros gastos el 0,5% (principalmente por una subida media del 0,6% en el turismo y la hostelería, cuyos precios se han encarecido un 7,3% en los 12 últimos meses).

El IPC reafirma así la idea de que, por la vía de los precios, la agricultura, el sector más afectado por la entrada en la CE, cede parte del producto de sus buenas cosechas y transfiere: rentas a los demás sectores, menos afectados de momento por la competencia, sobre todo el de servicios. Esta moderación de precios, sin embargo, benefició especialmente en abril a algunas de las regiones más pobres y cuyos habitantes emplean mayor proporción de sus presupuestos a la alimentación: en Castilla-La Mancha el IPC bajó un máximo del 0,9% y en Andalucía el 0,6%. Pero también hubo acusados descensos en zonas productoras de frutas, hortalizas y aves, como Cataluña (0,6%), Canarias (0,5%), Aragán y País Valenciano (0,4%). Dentro de la media nacional del 0,3% de bajada quedaron Murcia y País Vasco. La reducción fue menor en Asturias, Cantabria, Galicia y Navarra (0,2%), así como en Madrid, Castilla y León y Extremadura (0,1%). En Baleares hubo un 0% y en La Rieja el IPC subió el 0,3%.

El 1,3% acumulado por el IPC en los cuatro primeros meses del año -aun cuando Madrid, Galicia, Canarias y Cantabria siguen en el 2% o por encima- vuelve a aproximar la inflación española a la media europea, de la que se había distanciado en el primer trimestre en 0,7 puntos (1,6 España y 0,9 la CE). Los principales países (RFA, Francia y Reino Unido) todavía no han llegado este año al 1%.

Mientras el portavoz del Gobierno, Javier Solana, resaltó que es la primera vez desde 1973 que la tasa anual de inflación se sitúa por debajo del 4% y puede lograrse el 3%. a final de año, otras opiniones fueron menos optimistas. En el Congreso, los grupos parlamentarios se mostraron cautos; según Europa Press, Manuel Renedo (AP) dijo que "lo importante es que estas cifras se noten en la mujer que va comprar al mercado", Agustín Rodríguez Sahagún (CDS) que "la inflación subyacente sigue existiendo", y Nicolás Sartorius (IU) que "habrá que ver si esto es una tendencia". Por los sindicatos, UGT reafirmó que la bajada de la inflación sigue siendo compatible con alzas salariales superiores, en tanto CC OO precisó que las buenas cosechas y las importaciones de choque han afectado al componente más inestable del índice, lo que "no debe servir para lanzar las campanas al vuelo".