Un plan para acabar con la guerra fría
La superioridad militar es una "ilusión suicida", según un estudio conjunto de expertos de EE UU y la URSS
Expertos norteamericanos y soviéticos anunciaron en Washington un plan conjunto para concluir la guerra fría mediante la "desmilitarización de la competición" entre las dos superpotencias y un acuerdo para no usar la fuerza militar en los conflictos regionales del Tercer Mundo, no apoyando Moscú las denominadas "guerras de liberación nacional" ni Washington conteniendo el comunismo con sus contra. La CIA y, el KGB, conjuntamente, verificarían esta no injerencia."No más Afganistanes, no más Vietnams", explicaron los autores del insólito proyecto, entre los que se encuentran un miembro del Comité Central del Partido Comunista de la Unión Soviética, Georgui Arbatov, y un ex director de la CIA, William Colby., El concepto de superioridad militar es una "ilusión suicida", concluye el estudio presentado el jueves en Washington, tres semanas antes de la cuarta cumbre entre Reagan y Gorbachov.
Los participantes en este estudio ilusión, llevado a cabo a lo largo de más de tres años en reuniones alternas en Washington y Moscú, señalan la existencia de "una profunda y mutua frustración en ambas sociedades sobre la esterilidad de la guerra fría y una nueva determinación para romper su rígido marco". El plan, elaborado por el Comité Norteamericano de Relaciones con la URSS y el Instituto EE UU-Canadá de la Academia de Ciencias de la Unión Soviética, que dirige Georgui Arbatov, asesor de Gorbachov, formula 14 recomendaciones a los dos países para lograr una coexistencia estable.
Es un estudio privado, subrayaron soviéticos y norteamericanos, pero Gorbachov, con su nuevo pensamiento en política internacional, aceptaría ya algunas de sus propuestas, explicó Arbatov. Los expertos norteamericanos, dirigidos por el ex alto funcionario de la CIA y del Departamento de Estado Arthur Macy Cox, admitieron que el plan significa prácticamente lo contrario de lo practicado en política exterior por la Administración de Reagan.
Cox subrayó que las dos superpotencias se encuentran en el umbral de una oportunidad histórica para realizar un cambio significativo y beneficioso en sus relaciones. El uso de la fuerza militar durante la guerra fría, guerras, invasiones y operaciones encubiertas ha sido contraproducente y es demasiado caro. Reconocemos que seguiremos compitiendo, pero debemos cambiar nuestra forma de competir".
La propuesta más significativa del plan es que los dos países deben acordar formalmente no usar fuerzas militares de combate en los conflictos regionales ni introducir en los mismos, mediante naciones intermediarias, mercenarios o fuerzas paramilitares encubiertas. "Admitimos por primera vez", explicó Arbatov, "que el Tercer Mundo no será ni vuestro ni nuestro; debemos ser humildes para reconocerlo". Los expertos de ambos bandos admiten también que ninguna de las dos superpotencias puede ya garantizar el estado actual en todo el mundo.
La aplicación de esta doctrina supondría, según se subrayó en la presentación del plan conjunto, el fin de la doctrina Reagan de contención, por guerrilleros de la libertad, del comunismo y la imposibilidad para Moscú de injerencia militar en el Tercer Mundo. Hubo problemas a la hora de definir dónde EE UU y la URSS están interviniendo o han intervenido, directa o mediante sus peones interpuestos. La parte soviética, por ejemplo, no admite que esta intervención se está produciendo en Nicaragua.
Grandes fracasos
Se llegó a un consenso para afirmar que dos importantes acciones militares, la guerra de Vietnam y la invasión soviética de Afganistán, han sido "grandes fracasos". En adelante se trataría de "aceptar los resultados de los conflictos regionales, sin que ninguno de los superpoderes intente imponer, por medios militares, su solución política o ideológica preferida".Las propuestas del plan para acabar con la guerra fría son, en esencia, las siguientes:
Estados Unidos y la Unión Soviética reconocen su mutua vulnerabilidad e interdependencia; deben adoptar el concepto de "razonable suficiencia" en su planificación defensiva; asimétricas reducciones de sus fuerzas convencionales en Europa; acuerdo para reducir sus arsenales nucleares estratégicos en un 50%, como primer paso; inmediato acuerdo de prohibición total de pruebas atómicas; prohibición verificable de armas químicas, y destrucción de los arsenales existentes.
Cumplimiento estricto de la interpretación establecida del tratado ABM de miles antibalísticos; acuerdo formal de no utilizar fuerzas militares en los conflictos regionales, ni directa ni indirectamente; acuerdo para limitar (un máximo de 200) el número de asesores militares enviados a los países del Tercer Mundo; establecimiento de una lista de armas avanzadas, que EE UU y la URSS acordarían no transferir a las naciones del Tercer Mundo; los acuerdos anteriores serían verificados conjuntamente por la CIA y el KG13.
Ls dos superpotencias acordarían tratar sus conflictos regionales y sus disputas internacionales principalmente a través de las organizaciones internacionales, apoyando y reforzando el papel de la ONU y empleando sus fuerzas pacificadoras.
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