"No creo que haya voluntad política para la reforma", afima González

ENVIADO ESPECIAL Felipe González se mostró anoche extremadamente pesimista respecto a las posibilidades de que los gobernantes europeos lleguen hoy a un acuerdo en la cumbre de la Comunidad Europea: "No creo que haya voluntad política de hacer la reforma y llevar adelante el Acta Única", dijo el presidente del Gobierno español, quien acusó a los países más desarrollados de aceptar el aumento del gasto agrícola pero no el de fondos estructurales para ayudar a las naciones comunitarias menos ricas.

González se convirtió ayer en el jefe de Gobierno más crítico en sus declaraciones hacia la marcha de la cumbre de Copenhague, al subrayar la falta de voluntad para equilibrar la situación entre los países más pobres y los más ricos en la CE. Según el presidente del Gobierno español, que se mostró anoche mucho más pesimista que a su llegada a Copenhague, el hecho de que los países desarrollados no estén dispuestos a aceptar un aumento de sólo 7.000 millones de ecus (unidades de cuenta europea) en 1992 para duplicar los fondos estructurales, muestra esta falta de voluntad política. González dijo estar "dispuesto a quedarme aquí hasta Navidades", si con ello se avanzase en las soluciones, cosa que, por lo demás, consideré "prácticamente imposible".

Actividad 'paralela'

Dos breves intervenciones, una referente a los gastos agrícolas y otra a los fondos estructurales, fueron la aportación de Felipe González en la reunión de los jefes de Gobierno y de Estado que integran el Consejo Europeo. Sin embargo, el presidente del Gobierno español mantuvo una cierta actividad paralela entrevistándose a solas con el primer ministro griego, Andreas Papandreu, a petición de éste, y presentando a sus colegas comunitarios el documento de Acapulco, que recoge las aspiraciones económicas y políticas de los principales países latinoamericanos.Aunque González minimizó el alcalnce de su encuentro con Papandreu, calificándolo de mero "contacto informativo", fuentes de la delegación griega -que ayer se alineó en todo momento con las posiciones españolas- dijeron que la conversación fue "de interés político": la negociación de la presencia de bases estadounidenses en territorio nacional es uno de los temas comunes en la política externa de ambos mandatarios socialistas mediterráneos.

El de Papandreu será, en cualquier caso, el único encuentro bilateral que González mantendrá en el curso de esta reunión del Consejo Europeo, a cuyo final el presidente del Gobierno ofrecerá una conferencia de prensa.

Por otra parte, y en vista de la práctica imposibilidad de sacar adelante ninguna de sus tesis acerca de la cohesión europea, la delegación española hará especial hincapié en otros temas secundarios de esta cumbre, como los referentes a la cooperación política.