Los espectáculos tendrán un 6 % de IVA

El teatro, el cine y la música mantendrán el 6% en la escalada del impuesto del valor añadido (IVA), que grava todo tipo de transacción comercial o de servicios, frente a la decisión inicial del Ministerio de Hacienda, que pretendía elevarlo al 12%. El 6% es la escala mínima del impuesto y se aplica únicamente a aquellos bienes considerados de interés social. El borrador de la ley de Presupuestos del Estado para 1988 proponía la reordenación de los tipos del IVA para homologarlos con los de la Comunidad Europea, que suprimirá las fronteras fiscales en 1993. El Ministerio de Cultura se manifestó en contra de la subida de este impuesto.

Un comunicado del Ministerio de Cultura aseguró que el proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado para 1988, aprobado por el Consejo de Ministros en su reunión del día 18 de septiembre, no ha alterado la regulación del impuesto sobre el valor añadido (IVA) aplicable a las actividades cinematográficas, teatrales y musicales.Se mantiene, en consecuencia, el tipo reducido del 6% de IVA y no el extraordinario del 12%, en los términos que preveía la ley del IVA de 1985, para las siguientes actividades: servicios prestados por artistas, intérpretes, directores y técnicos a los productores de obras cinematográficas y organizadores de obras teatrales y musicales; exhibición de películas cinematográficas y representación de obras teatrales y musicales; producción, importación y distribución y cesión de derechos de películas cinematográficas.

Supresión para autores

La única novedad introducida por el proyecto de ley de Presupuestos es la supresión del IVA para los autores. "Ello se hace porque la ley de Propiedad Intelectual, de próxima aparición, exime del impuesto del valor añadido a estos autores", dice el comunicado de Cultura.La exención va a afectar a artistas plásticos, escritores, colaboradores literarios, gráficos y fotográficos de periódicos y revistas, compositores musicales, autores de obras teatrales y autores de argumentos, adaptaciones, guiones o diálogos de las obras audiovisuales.

El debate generado en la última semana en torno a la posible subida del impuesto que afectaría a los espectáculos se debía a la dificultad para decidir el tipo de impuesto a causa de la problemática separación entre la naturaleza cultural y la parte industrial de los mismos.

La norma comunitaria, con la que se pretendía armonizar la ordenación del impuesto en España con el que rige en la CE, indica que los espectáculos no figuran en el tipo de impuesto reducido -aplicado sólo a los productos de primera necesidad-, sino que se les considera de tipo ordinario. Entre los productos culturales de primera necesidad figuran los libros, periódicos y revistas, pero no otras manifestaciones culturales ni los servicios prestados por los participantes- en estas actividades.

El intento de Hacienda de incluir en los presupuestos de 1988 esta reordenación se ha paralizado por el momento, entre otras razones porque existe ya una propuesta de directiva comunitaria en el sentido de reformar esta normativa, que ya ha sido aprobada por la Comisión y sometida al Consejo, con la intención de que todos los Estados miembros apliquen sus disposiciones legales antes de 1993.

El comunicado de Cultura, cuyo titular es Javier Solana, no descarta la posibilidad de que en un futuro esta medida se vea alterada. "La situación española, definida en el texto remitido, no puede en todo caso abstraerse del debate europeo y de los resultados que éste produzca", concluye.

'Verdadero drama'

El director del Instituto de la Cinematografía, Fernando Méndez-Leite, dijo el jueves en el programa de televisión Debate que el aumento no se produciría. Sobre este asunto ya se había pronunciado negativamente con anterioridad, al igual que el director del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la música, José Manuel Garrido, o el presidente de la Federación de Entidades de Empresarios de Cine de España, José del Villar. Para Garrido, el aumento del impuesto supondría desequilibrar la política de democratización del teatro, cuando en los últimos años el sector se ha reactivado.Según Villar, que calificó la subida pretendida como "verdadero drama", ésta representaría 2.000 millones de pesetas, "que es la milésima parte de los ingresos presupuestados por este impuesto. Sin embargo, para los sectores afectados la subida significa una cifra equivalente, según sus representantes gremiales, a la totalidad de los beneficios que pueden llegar a obtener este tipo de actividades".

La Federación de Entidades de Empresarios de Cine de España agrupa a 44 asociaciones que registran los empresarios de 2.750 locales, dedicados indistintamente a cine, teatro o música, salvo en las grandes ciudades.