González propone a sindicatos y patronal definir conjuntamente desde la inflación a la política fiscal

El presidente del Gobierno, Felipe González, remitió ayer a sindicatos y patronal un escrito en el que define su oferta de concertación y los puntos sobre los que sería conveniente un acuerdo. Entre ellos, cita: la política fiscal, la tasa de inflación y una banda salarial acorde con estos últimos objetivos.

El presidente mantiene en el documento remitido ayer a los sindicatos UGT y CC OO y la patronal CEOE los tres objetivos que ya hizo públicos en su encuentro con los máximos representantes de estas organizaciones: aumento de la ocupación, incremento de la política social y consecución de un sistema económico más eficaz y competitivo.El documento -cinco folios sin membrete alguno- lleva como título Primera fase de la concertación, y en él se explican las distintas variables y relaciones entre exportaciones, demanda interna, inversiones, coste del trabajo y coste del capital.

Una vez sentadas estas bases, se sugieren como puntos de concertación los siguientes: política fiscal y financiera que garantice el mayor crecimiento de la inversión; determinación de una tasa-objetivo de inflación que permita mantener y mejorar la situación de competitividad, y consideración de una banda salarial compatible con los objetivos de inflación, pero que permita una evolución favorable de los salarios.

Sin embargo, el documento advierte de la necesidad de mantener sujeto el déficit y los efectos que en el mismo crea un aumento del gasto público.

En cuanto a la política social, se propone como objeto de análisis la distribución de la carga fiscal -con referencia a las cotizaciones sociales-, la estructura del gasto, el nivel de inversiones públicas, etcétera.

Y, por último, en relación a conseguir una mejora de la competitividad, se proponen como temas a discutir: el papel de las importaciones en el proceso de modernización, la inversión extranjera, balanza de pagos, nuevas tecnologías, formación profesional, política de ajuste industrial, etcétera.

La respuesta más rápida fue, sin duda, la de CC OO que en una carta firmada por Camacho, muestra su decepción porque "el documento no se ajusta a lo solicitado por nosotros ni a lo prometido en la reunión del pasado 16 de julio".

Fuentes de UGT subrayaron que no querían entrar a valorar el documento "porque eso supondría entrar en una dinámica de negociaciones de la que hasta ahora nos hemos mostrado contrarios". CEOE declinó hacer comentarios hasta no estudiar el documento.