Gorbachov siembra la alarma en la RFA
Las iniciativas de desarme del máximo líder soviético, acogidas en un principio con satisfacción, comienzan a provocar alarma en medios gubernamentales de la República Federal de Alemania (RFA). Mientras continúa la guerra de nervios en el seno de la coalición sobre la eliminación de los misiles de medio alcance en Europa, surgen informaciones que auguran nuevas propuestas espectaculares que causarían una crisis sin precedentes en todo el ideario político y militar en el que se basa el Estado alemán occidental.En la próxima cumbre del Pacto de Varsovia, a celebrarse a finales de este mes en Berlín Este, Gorbachov propondrá, según informaciones de diversos medios de la RFA, la retirada total de tropas extranjeras de los países soberanos. La URSS se ofrecería así a retirar sus 380.000 soldados estacionados en la República Democrática Alemana, 80.000 en Checoslovaquia, una cifra similar en Hungría y la mitad aproximadamente en Polonia. Esta nueva propuesta causará, sin duda, gravísimas dificultades al Gobierno alemán occidental, que cuenta ya con sondeos que conceden mayor credibilidad a Gorbachov que al presidente norteamericano entre la población. El Gobierno federal, que considera irrenunciable la presencia norteamericana en su territorio, se vería sometido a una presión cada vez mayor de la población si trata de paralizar sistemáticamente las iniciativas de Moscú.
Reunificación alemana
El ex ministro de Finanzas y hombre fuerte del partido liberal, el conde Otto Lambsdorff, ha declarado al diario Bild que espera que Gorbachov ofrezca a los alemanes la reunificación bajo ciertas condiciones. El hecho de que este político se pronuncie abiertamente respecto a este siempre espinoso tema da crédito a informaciones según las cuales el Gobierno federal cuenta desde hace seis meses con indicios de que la reunificación alemana podría entrar en la estrategia global del nuevo dirigente soviético. Lamsborff dijo a Bild. "Ahí se nos viene algo serio encima".
El Gobierno federal está obligado por la Constitución a mantener como objetivo político principal la reunificación de los dos Estados alemanes. Según una encuesta del Gobierno, el 71% de los alemanes se muestra a favor de una Alemania reunificada y neutral.
El Gobierno de coalición entre democristianos (CDU-CSU) y liberales (FDP) se halla ya profundamente dividido ante la respuesta a dar a la propuesta de la doble opción cero, que establece la eliminación de todos los misiles de medio alcance (de un radio de acción entre 500 y 5.000 kilómetros).
Un mes después de anunciar Gorbachov que acepta también la eliminación de los misiles de menor alcance (entre 500 y 1.000 kilómetros), el Gobierno del canciller Helmut Kohl sigue siendo incapaz de dar una respuesta unánime.
En Estados Unidos, la decisión favorable a la doble opción cero parece haber sido ya tomada. En la República Federal de Alemania, sin embargo, el ministro de Defensa, Manfred Woerner, es escéptico frente a la eliminación de los misiles de medio alcance de mayor radio (entre 1.000 y 5.000 kilómetros) y absolutamente contrario a la retirada de los de menor radio (entre 500 y 1.000 kilómetros). El canciller Kohl se declaró favorable ante el Bundestag (Parlamento) a la primera opción cero y condicionó su apoyo a la segunda a que se la vincule a acuerdos sobre armamento convencional. Finalmente, el ministro de Asuntos Exteriores, Hans-Dietrich Genscher, es firme partidario de la doble opción -cero.
Kohl sigue retrasando la decisión, y Genscher viajó el lunes a EE UU en visita relámpago para pedir paciencia a Washington, donde la incertidumbre europea choca con creciente incomprensión.
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