Managua denuncia un plan de atentados de la CIA

Nicaragua protestó ayer ante Estados Unidos por "instigar actos terroristas" utilizando a los rebeldes antisandinistas para sabotear objetivos de la revolución mediante un plan que la Agencia Central de Inteligencia (CIA) ha preparado para abril y mayo próximos con el nombre de ofensiva de primavera.

El Ministerio de Asuntos Exteriores nicaragüense ha enviado dos notas de protesta al secretario de Estado norteamericano, George Shultz, responsabilizando al Gobierno del presidente Ronald Reagan de los daños materiales y humanos que producirá tal ofensiva, y pidió a EE UU que se "abstenga y desista de su inmoral política terrorista contra Nicaragua".El diario norteamericano The New York Times informó el jueves que la CIA ha suministrado a los antisandinistas datos sobre puentes, diques, subestaciones eléctricas, centrales telefónicas repetidoras e instalaciones portuarias, para que sean destruidos, informa la agencia Efe.

La protesta de Managua se produce tres días después de que Nicaragua responsabilizase a la Administración de Reagan de un atentado de las fuerzas rebeldes contra una torre eléctrica de alta tensión a la orilla del lago de Managua y de que el Senado norteamericano rechazara una resolución que hubiera impedido la entrega a la contra de los últimos 40 millones de dólares pendientes de los 100 aprobados por el Congreso el año pasado.

Por otra parte, Alfonso Robelo, uno de los dirigentes de la contra, confesó el viernes al diario norteamericano The Washington Post que su partido, el Movimiento Democrático Nicaragüense, y otro grupo de la guerrilla nicaragüense recibieron el último año 100.000 dólares (13.000 millones de pesetas) del teniente coronel Oliver North, el destituido funcionario del Consejo de Seguridad Nacional de EE UU y principal protagonista, junto al vicealmirante John Poindexter, del escándalo del Irangate.

Ayer, uno de los dirigentes de la oposición armada a Nicaragua, Fernando Chamorro, anunció que abandonará la Unión Nicaragüense Opositora, añadiendo otro factor a la crisis de la organización desde la dimisión de Arturo Cruz.