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Thatcher reitera su negativa a negociar la soberanía de las Malvinas

La primera ministra británica, Margaret Thatcher, reiteró ayer su negativa a negociar la soberanía de las Malvinas, pero evitó cuidadosamente rechazar de plano la propuesta argentina de poner fin al estado de hostilidades reinante entre los dos países desde la guerra de 1982 en el archipiélago austral. Margaret Thatcher voilvió a repetir en la Cámara de los Comunes que la soberanía "no era negociable", y recalcó que los deseos de los habitantes eran "de primordial importancia"

La jefa del Gobierno británico había eludido hacer referencia a la propuesta argentina en una primera declaración a la Cámara sobre sus conversaciones en Washington con el presidente Ronald Reagan y en la que sólo de pasada se hablaba de la explicación dada a éste sobre la imposición de la zona de exclusión pesquera de 150 millas. Pero luego, ante la insistencia de la oposición, tuvo que hacer una declaración política.Buenos Aires anunció el lunes, poco antes de la salida del presidente Raúl Alfonsín con dirección a Estados Unidos, que Argentina estaría dispuesta a decretar el cese de las hostilidades con el Reino Unido si Londres accedía a no imponer la zona de exclusión pesquera que debe entrar en vigor a partir del primero de febrero próximo y a entrablar "conversaciones globales" sobre todos los problemas del archipiélago, incluida la soberanía.

En realidad, lo que Buenos Aires propone parece ser la iniciación de negociaciones sobre la base de la aplicación de la resolución 1.421 de la Asamblea General de las Naciones Unidas, que Londres ha rechazado siempre.

Uno de los subsecretarios del Foreign Office, Timothy Eggar, manifestó en declaraciones a la BBC que "no parecía que la propuesta argentina (entregada en Londres el lunes a través de la Embajada de Brasil, que cuida de los intereses argentinos desde la ruptura de relaciones diplomáticas), a la vez que calificaba la propuesta de "ejercicio de diplomacia de magáfono". Anteriormente, fuentes del Foreign Office manifestaron: 'los elementos contenidos en la propuesta argentina parecen poner como condición previa la aceptación por nuestra parte de incluir el tema de la soberanía en las conversaciones y no estamos dispuestos a negociar eso. Nosotros no tenemos ninguna duda sobre la soberanía", añadieron las fuentes.

Sin embargo, a pesar de esta actitud, las fuentes añadieron que Ia propuesta argentina estaba siendo estudiada cuidadosamente". Entretanto, Thatcher mencionó brevemente el asunto de las Malvinas en el contexto de su informe de ayer a la Cámara de los Comunes sobre sus conversaciones en Washington con el presidente Reagan.

La primera ministra manifestó que había explicado a Reagan Ias razones" que "habían movido" al Reino Unido "a imponer una zona de conservación" en torno a las Malvinas. 'Te dije que prefería-mos una solución multilateral [al problema de la conservación] siempre que el Gobierno argentino estuviera dispuesto a cooperar", añadió.

El Gobierno británico ha rechazado cualquir negociación con Argentina que incluya la discusión de la soberanía, pero ha estado pidiendo desde el fin de la guerra de las Malvinas una declaración formal de cese de hostilidades.

[Alfonsín desplegó ayer una ofensiva diplomática en Washington para lograr el respaldo norteamericano a la iniciativa argentina del cese de hostilidades con Londres sobre las Malvinas, según informa Efe. Alfonsín se reunió con Reagan y le informó de la propuesta argentina. Reagan, por su parte, reiteró su esperanza de que se llegue a una "solución pacífica negociada" del conflicto de las Malvinas y "escuchó con interés" la propuesta de Alfonsín, señala AFP, pero no ofreció su mediación para resolver el contencioso].

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