La subida de precios agrícolas europeos, bloqueada por la RFA

Los ministros de Agricultura de la Comunidad Económica Europea (CEE) reanudaron ayer sus trabajos en busca de un acuerdo sobre los precios agrícolas para la campaña 1985-1986, en medio de crecientes presiones para aislar a la República Federal de Alemania (RFA), país que se niega en redondo a aceptar cualquier recorte en el precio de los cereales.Cinco reuniones han tenido lugar hasta ahora sin ningún resultado, a causa de lo intransigente de las posturas. Sin embargo, ha ido tomando cuerpo la idea de que es preciso acudir al voto mayoritario de los socios, excluyendo la unanimidad, como única manera de obviar el actual atolladero en que se encuentra la negociación de los precios agrarios, que afecta a ocho millones de agricultores.

La Comisión Ejecutiva de la CEE., con sede en Bruselas, ha proptiesto un paquete de precios agrícolas muy austero, que supone un recorte de los precios de los cereales del 3,6%, en un intento de poner freno a los crecientes gastos agrícolas. El ministro alemán occidental de Agricultura, Ignaz Kiechle, ha anunciado en repetidas ocasiones que ejercitará el derecho de veto para cualquier recorte en los precios de los cereales.

La mayoría de los Estados miembros acepta como inevitable la necesidad de proceder al recorte de algunos precios de garantía. Fuentes diplornáticas ponen de manifiesto el creciente enfado que la intransigencia alemana está provocando, con el resultado de que algunos países se muestren ahora favorables a un voto mayoritario, por encima de la norma de la unanimidad. La posición del ministro alemán occidental de Agricultura, por otra parte, pone al Gobierno de Bonn en una posición incómoda, por cuanto auspicia desde hace tiempo la necesidad de sustituir la regla de la unanimidad por el voto mayoritario para resolver las cuestiones en la Comunidad.

Asunto capital para el futuro

La Comisión considera los precios un asunto capital para el futuro de los diez. Se trata de poner freno a los excedentes agrícolas mediante el recorte de los precios de garantía. Después de la cosecha record del pasado año, cuyos 150 millones de toneladas superaron por primera vez la cosecha de cereales de Estados Unidos, los silos de grano de la Comunidad están a rebosar. "Tenemos verdaderos problemas de almacenamiento", ha manifestado un alto funcionario de la Comisión Europea.

En 1984, el presupuesto agrícola de la CEE, la mayoría dedicado a subvencionar producciones, se elevó a unos 14.000 millones de dólares, cerca de 2,4 billones de pesetas, siendo el deseo comunitario mantener el presupuesto agrícola al mismo nivel del año anterior, lo que supone recortes del 6% en otros productos agrarios, además de los cereales, tales como las frutas y vegetales.