Elevar el nivel tecnológico, principal objetivo

Elevar el nivel tecnológico y lograr una capacidad adecuada para construir las avanzadas armas que actualmente fabrican los países más desarrollados es el principal objetivo que persiguen los ministerios de Industria y de Defensa para el sector armamentístico español, según aseguran en ambos departamentos. La excesiva dependencia de la tecnología exterior obliga, por ejemplo, a que la Red Aérea de Alerta y Control (programa Combat Grande) o la Red Territorial de Mando (RTM) se estén haciendo con tecnología norteamericana, al igual que los principales programas de modernización de material en el Ejército del Aire y en la Armada.La decisión del Gobierno de no efectuar compras directas de armamento en el exterior, sino negociar fórmulas de cooperación o coproducción con los vendedores, supondrá la introducción en el sector español de nuevas tecnologías avanzadas. Con el programa de compensaciones del FACA, por ejemplo, CASA trabajará con composites (fibras de poco peso y muy resistentes)

El Plan Informático Nacional, por otra parte, en el que se invertirán varias decenas de miles de millones, también supondrá un fuerte revulsivo para la industria relacionada con la Defensa. El Plan Informático Nacional ayudará. En los próximos años está previsto que el 50% de los productos electrónicos fabricados en España sean para uso militar, en lugar del 1,7% actual. Los ejércitos invertirán entre 1984 y 1990 unos 700.000 millones en informática y electrónica. Sólo en la División de Electrónica e Informática del INI se invertirán este año 4.000 millones de pesetas para modernizar sus estructuras.

Pese a la deficiente situación actual en el nivel tecnológico, algunas empresas ya fabrican productos muy avanzados. La firma privada Sener ha logrado construir, aunque prácticamente copiando modelos extranjeros, bombas guiadas por láser para la aviación. La empresa catalana Electrónica Básica, SA (Elbasa), produce circuitos impresos para el radar del cazabombardero F-18A y para el misil francés Exocet. Experiencias Industriales, SA (EISA), fabrica también circuitos para el misil antiaéreo italiano Aspide.

Igualmente, en un futuro próximo CECSA fabricará complicados simuladores para el F-18A. CASA construirá piezas para el avión de combate europeo (ACE). Chaconsa, en colaboración con la Dirección General de Armamento y Material, comercializará un nuevo vehículo anfibio de colchón de aire (VCA), y CETME, el cañón multitubo antiaéreo Meroka. Santa Bárbara construirá el carro de combate español Lince, y en seis años fabricará en serie el primer misil español, que será antiaéreo.

En la actualidad, el sector armamentístico español sólo es autónomo en productos de baja tecnología, como armas cortas, camiones o pequeños barcos. Cualquier producto de elevado nivel tecnológico, como portaeronaves, submarinos o aviones de transporte, necesitan de aplicaciones técnicas procedentes, por orden de importancia, de EE UU, Francia y la República Federal de Alemania.