El Torreón de Lozoya acoge una exposición antológica dedicada a Ignacio Zuloaga
El Torreón de Lozoya, de Segovia, ha sido elegido como escenario de una exposición antológica dedicada a Ignacio Zuloaga, en la que se ofrecen 60 obras del pintor, cedidas por su familia y por varios museos, y colecciones particulares. En las salas de la galería se presenta una exposición paralela, en la que la Academia de Historia y Arte de San Quirce ofrece una visión panorámica de la vida social, cultural y artística de la época en que los Zuloaga llegaron a Segovia.
Esta exposición, que permanecerá abierta al público hasta el 26 de julio, ha sido organizada por la Caja de Ahorros, el Ayuntamiento de Segovia y la Diputación Provincial. Constituye una de las muestras más representativas del pintor de las exhibidas hasta ahora, aunque no está todo lo mejor de su obra por encontrarse en museos y colecciones extranjeras, como Las brujas de San Millán, Gregorio el Botero y La familia de mi tío Daniel.La influencia de Segovia en este artista nacido en É¡bar en 1870 es muy fuerte y así se destaca en la exposición ya que los años centrales de su obra, desde 1906 a 1914, están adscritos a esta ciudad a la que se traslada todos los otoños durante 15 años.
Influencia segoviana
En Segovia, dice Enrique Lafuente Ferrari, pinta los cuadros que le hicieron famoso, festejados en París y toda Europa, los que darán a su nombre una aureola que no había alcanzado antes ningún pintor español de su tiempo. "Consciente y agradecido, Zuloaga decía años después que no había trabajado bien más que en Segovia, lugar de creación de enfáticas composiciones de una España romántica y pesimista, de las que San Juan de los Caballeros (actual Museo Zuloaga) será laboratorio pictórico".Para el promotor y estudioso de la vida y obra de Zuloaga, Mariano Gómez de Caso Estrada, Segovia era el atractivo para todos los componentes de la generación del 98, pero ninguno ha dejado una huella tan profunda como él.
Acostumbra a pintar en la Casa del Crimen, del barrio de San,Millán; en las Canongías (casa de la Inquisición); en la calle Daoíz, y en la iglesia de San Juan de los Caballeros, que adquiere su tío Daniel para destinarla a taller de cerámica. Su vida en Segovia se desarrolla en pensiones o casas, pues no tiene residencia fija, y come en los figones de la plazuela de la Rubia y el Azoguejo.
Paralelamente a la muestra se han programado conferencias de Mariano Gómez de Caso; Luis Felipe de Peñalosa; Joaquín de la Puente, director del Casón del Buen Retiro; Santiago Amón, y una tertulia, en la que intervendrán Domingo Ortega, el mesonero Cándido y diversas personas que conocieron al pintor.
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