González intentará en Austria equilibrar la balanza comercial, deficitaria para España

El presidente del Gobierno, Felipe González, inicia hoy una visita oficial de dos días a Austria, la primera que realiza a dicho país un jefe del Ejecutivo español, con una agenda de temas políticos y comerciales, que no encierra ningún contencioso bilateral, salvo el de intentar nivelar una balanza de pagos deficitaria para España en más de 8.000 millones de pesetas. González depositará flores en el mausoleo que recuerda a los 7.000 españoles muertos en el campo de concentración nazi de Mauthausen.

El presidente español, que llegará a las tres de la tarde al aeropuerto de Wien-Schwechat, de la capital austriaca, mantendrá poco después la primera y única entrevista con su colega, el canciller Alfred Sinowatz, presidente desde mayo pasado de un Gobierno de coalición social-liberal, que se formó al retirarse del poder Bruno Kreisky, después de 13 años, al no haber obtenido el partido socialista la mayoría absoluta en las elecciones de abril.El Partido Socialista Austriaco (PSO), que preside Sinowatz (Kreisky es presidente honorario), tiene no obstante una mayoría de ministros en el Gabinete, -11, frente a tres del liberal FPO- González tratará de entrevistarse con su amigo y ex canciller Bruno Kreisky -aunque éste se encontraba hasta ayer en su residencia de Palma de Mallorca- y con el actual ministro de Asuntos Exteriores, Erwin Lanc, una de las figuras más relevantes del actual PSO.

En fuentes españolas se han mencionado como temas de la conversación que mantendrán el presidente español y el canciller austriaco los de seguridad y desarme, Conferencia de Helsinki, América Central y Oriente Próximo. En este último tema, los sucesivos Gobiernos austriacos han mostrado una especial actividad medidadora, sobre todo en lo que respecta a un acercamiento entre palestínos e israelíes.

Consenso social

Felipe González, que almorzará el lunes en el palacio imperial de Viena con el jefe del Estado, Rudolf Kirschlaeger, mantendrá dos reuniones de trabajo con representantes sindicales y de los empresarios austriacos, que desde hace años han establecido un modelo de consenso o pacto social que mantiene a la economía nacional como una de las más estables, con menor índice inflacionario y de paro, de la Europa occidental.El intercambio comercial entre los dos países viene siendo tradicionalmente deficitario para España. En 1982, Austria vendió maquinaria y vehículos de transporte a España por valor de 15.500 millones de pesetas, mientras que ésta vendió frutas, verduras, vinos y productos manufacturados a Austria por valor de 6.800 millones de pesetas. En el tema de los vinos de exportación, en su mayoría de jerez, existe un problema, al considerarlos los austríacos como vinos de mesa y ponerles unos impuestos más altos de los que tienen normalmente los vinos del tipo de los jerezanos, como ocurre con el oporto portugués.

El Gobierno austríaco apoya la política de la Internacional Socialista respecto de los esfuerzos de paz en Centroamérica, y Sinowatz ha acogido la iniciativa de Felipe González para ayudar a la oposición democrática en Chile. Sin embargo, en medios diplomátícos españoles se ha avisado al presidente español del interés empresarial vienés por colaborar con los españoles en proyectos comerciales latinoamericanos y ,de la necesidad de que, como contrapartida, España pida facilidades para entrar comercialmente en los países del Este europeo, de los que Austria es, en cierta forma, la puerta, a lo que se ha negado sistemáticaniente.

Felipe González, al que no acompaña en el viaje el ministro Fernando Morán, visitará el martes el campo de Mauthausen, donde se, calcula que murieron más de 7.000 españoles exiliados al final de la guerra civil.