Mejoran las relaciones entre las dos Alemanias al retirar la RDA sus armas automáticas fronterizas

Entre la República Democrática Alemana (RDA) y la República Federal de Alemania (RFA) se ha iniciado un período de distensión tras la entrada en vigor de varias medidas, que -sin llegar a hacer más permeable la frontera entre las dos Alemanias- crean un clima favorable, a pesar de la amenaza del estacionamiento de los euromisiles atómicos.

Después de un intenso verano de viajes y contactos entre políticos de las dos Alemanias, con motivo de las vacaciones o del 500 aniversario del nacimiento de Lutero y de la sorprendente concesión de un crédito a la RDA, se anunció hace tres días la supresión del cambio obligatorio a los niños menores de 14 años que visitan la RDA.La supresión del llamado precio de entrada -los 7,50 marcos (425 pesetas) de cambio obligatorio por cada día de estancia- a los menores de 14 años fue el primer síntoma concreto de deshielo.

Después siguió la noticia de que la RDA ha iniciado el desmantelamiento de las instalaciones SM 70, que disparan automáticamente sobre todo el que se aproxima a la zona mortal que separa la RDA de la RFA.

En Bonn se considera positivo el gesto de desmontar las SM 70 y se espera que la acción afecte a las 60.000 que hay instaladas a lo largo de 440 de los 1.393 kilómetros de frontera.

El desmantelamiento no significa que la frontera haya sido abierta -quedan las alambradas, los centinelas y los campos de minas-, pero es un síntoma positivo, aunque no faltan las informaciones sobre instalación de nuevos mecanismos más refinados y modernos para evitar las fugas de la república.

En los últimos días los centinelas de la RDA no hicieron uso de las armas en varios intentos de fuga. Ayer mismo, dos jóvenes huyeron y fueron perseguidos por guardias fronterizos de la RDA, que no dispararon.

Varios factores explican esta suavización por parte de las autoridades de la RDA. El más inmediato parece ser la necesidad de créditos en divisas occidentales. En Bonn se anunció, al conceder el crédito de 1.000 millones de marcos (57.000 millones de pesetas) el pasado mes de julio, que se esperaba de la RDA concesiones de tipo humanitario.

La RDA, acuciada por la necesidad de obtener más créditos en divisas occidentales, parece haber iniciado una política de mejores relaciones con la RFA, que puede responder a las demandas crediticias del otro lado.

El tiempo apremia para mejorar las relaciones entre las dos Alemanias, que podrían sufrir un enfriamiento si a fin de año se llegan a estacionar en la RFA los Pershing 2 y misiles de crucero. La RFA y la RDA tienen un escaso margen de maniobra ante las dos superpotencias al verse obligadas a aceptar -contra la voluntad de la mayoría de la población- el estacionamiento de Pershing y misiles de crucero, de un lado, y de SS-21, SS-22 y SS-23 en respuesta. El dirigente soviético Yuri Andropov ya anunció a Kohl en Moscú, el pasado julio, que "las dos Alemanias podrían contemplarse a través de una barrera de cohetes atómicos" si llegan a estacionarse los euromisiles de la OTAN.