_
_
_
_

La detención en Costa Rica de un presunto 'etarra' desvela planes desestabilizadores de Managua

La detención en Costa Rica del presunto activista de ETA Gregorio Jiménez Morales ha puesto al descubierto no sólo un compló para matar a los líderes de la organización antisandinista Arde (Alianza Revolucionaria Democrática), sino un amplio plan de desestabilización interna que incluía atentados contra instalaciones eléctricas y aeropuertos. El Gobierno de San José cree tener pruebas sobre la implicación directa de Managua en el proyecto.

Para la ejecución de algunas acciones estaría previsto el empleo de aviones, lo que ha obligado al Gobierno, según confirmó el presidente, Luis Alberto Monge, a pedir de inmediato la ayuda de varios países amigos, principal mente Estados Unidos, para instalar baterías antiaéreas en e aeropuerto internacional de San José, en las refinerías de petróleo y en varias plantas de energía eléctrica.Parecería que el único país centroamericano que carece de ejército por mandato constitucional está abocado a un rearme progresivo ante las amenazas que le llegan del exterior.

7.000 policías

Hasta ahora, las medidas de seguridad internas se habían limitado a un aumento de sus efectivos policiales, hasta superar el número de 7.000 y a un mejor equipamiento de armas ofensivas. Estas baterías antiaéreas constituyen el primer armamento netamente militar que se instala en el país.

La supuesta complicidad de Managua sería también la razón fundamental que ha movido al Gobierno a amparar este asunto bajo el secreto de Estado. Un segundo motivo para silenciar por ahora la marcha de las investigaciones sería la existencilde una compleja trama internacional con ramificaciones internas más amplias de lo que se creyó en. un principio.Tres pisos francosEl carácter rigurosamente reservado de las pesquisas ha hecho que una espesa capa de silencio haya caído sobre el caso. Como ampliación de los datos publicados ayer en la última edición de este periódico, se ha sabido que han sido detectados en la capital pisos francos que empleaba esta organización.

Ante el silencio de las fuentes oficiales, otros medios no se ponen de acuerdo sobre, la fecha de la detención del etarra ni el modo en que ésta se produjo. Se aseguró, sin embargo, que todo se inició hace dos semanas a raíz del ingreso en un hospital de un salvadoreño herido.

En aquella ocasión, el propio ministro de Seguridad, Angel Edrmundo Solano, salió en televisión para restar importancia al caso y cortar de raíz toda curiosidad periodística.Se desconoce si Gregorio Jiménez Morales fue capturado en uno de los tres pisos francos o en la calle. La policía insiste en que por ahora es el único detenido del caso, aunque algunos medios periodísticos insisten en que hay 11 más.

De cualquier forma, la documentación ocupada en los citados pisos permite suponer numerosas complicidades en el interior de Costa Rica.Se ha intensificado mientras tanto la vigilancia en el aeropuerto y en la capital. Numerosos extranjeros, de origen europeo, han sido sometidos a verificaciones de identidad.

El Mando Unico no participó En Bilbao, según informa la agencia Efe, portavoces autorizados aseguraron que el Mando único para la Lucha Contraterrorista en el País Vasco no participó en la operación de desarticulación del presunto comando de ETA en Costa Rica. Asimismo estos portavoces precisaron que no se ha recibido ningún requerimiento para colaborar en este asunto,. aunque "la policía, -caso de mediar alguna solicitud, colaborará". Las mismas fuentes explicaron que se encuentran a "la espera de noticias" procedentes de Costa Rica.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_