Las Madres de la Plaza de Mayo inician una campaña contra la ley de amnistía de los militares
Las Madres de la Plaza de Mayo iniciaron en Buenos Aires una campaña contra la llamada ley de amnistía o de pacificación naciónal que pretende dictar el Gobierno militar argentino. El anuncio coincidió con la negada al país de una delegación del Parlamento Europeo integrada por miembros de los grupos democristiano, socialista y comunista.
Después de una larga reunión sostenida con las madres el mismo día de su llegada, el senador italiano Guido Fanti, presidente del grupo comunista, aseguró que la opinión pública europea está concienciada sobre el problema de los desaparecidos en Argentina y que "van a continuar las presiones para que se informe sobre cada uno de los casos y se castigue a los culpables incluso después de que se efectúen las elecciones".Italo Lúder, que será nombrado con toda probabilidad en los próximos días candidato peronista a la presidencia, admitió ayer que el efecto de la ley, una vez dictada, será "irreversible" desde el punto de vista jurídico.
Aunque sea derogada posteriormente por un Gobierno constitucional, la ley seguirá teniendo efecto.
Por otra parte, el general Bignone, presidente del Gobierno militar, desmintió haber pedido a los obispos su mediación para que los sectores sociales acepten la sanción de la ley.
Según la información oficial, el proyecto está ahora en las secretarías generales de los ejércitos de Aire, Mar y Tierra. El próximo paso sería la consulta directa con quien resulte elegido presidente en los comicios que se celebrarán el, próximo 30 de octubre. En ese caso, la sanción definitiva se demoraría hasta el mes de noviembre.
El principal obstáculo que se habría planteado en el Ejército de Tierra es la resistencia del ala más dura al aceptar que recuperen su libertad no sólo los detenidos a disposición del poder ejecutivo, sino también aquellos que cumplen condenas aplicadas por la justicia federal por delitos de carácter subversivo.
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