Gromiko advierte que Moscú desplegará nuevos misiles nucleares si fracasan las conversaciones de Ginebra

El ministro de Asuntos Exteriores de la Unión Soviética, Andrei Gromiko, advirtió ayer en Bonn que su país desplegará nuevos misiles nucleares de alcance intermedio, similares a los euromisiles occidentales, en caso de que fracasen las negociaciones en curso en Ginebra.

En el brindis que tuvo lugar en la cena que ofreció en su honor el ministro de Asuntos Exteriores de la República Federal de Alemania (RFA), Hans-Dietrich Genscher, Gromiko declaró: "el equilibrio", entre los Estados Unidos y la Unión Soviética, .será garantizado de cualquier forma, pero a un nivel más elevado que el actual".El ministro soviético precisó que "el programa de rearme de la OTAN constituiría para el mundo entero durante un largo período de tiempo una confrontación nuclear con todas las consecuencias que resultasen de ella".

"Moscú", añadió Gromiko, "no puede ignorar el hecho de que la RFA es el único Estado europeo en el cuál está previsto el despliegue de euromisiles Pershing 2, los cuales pueden en algunos minutos alcanzar objetivos estratégicos situados en territorios situados muy en el interior de la Unión Soviética"

"Nosotros decimos abiertamente", prosiguió Gromiko, "que no estamos de acuerdo, y que preferimos un acuerdo sobre el descenso de la confrontación militar, y que cuanto más lejos vaya este descenso, mejor será."

Por su parte, Genscher declaró que "la URSS debería aceptar la proposición occidental de renunciar completamente a los euromisiles" porque "tal aceptación sería el mejor medio para resolver el problema de los mis¡les nucleares". Genscher añadió que "la decisión de la OTAN es la consecuencia del desarrollo inquietante del arsenal auroestratégico soviético, sobre todo en lo que concierne a los misiles SS-20".

La declaración de Gromiko se produjo horas después que el diario derechista Die Welt publicase informaciones detalladas de que los soviéticos desean una victoria de los socialdemócratas (SPD) en las elecciones federales del 6 de marzo.

A cuatro columnas, y en primera página, Die Welt anuncia que el dirigente soviético Yuri Andropov dijo al candidato socialdemócrata, Hans-Jochen Vogel, que "espera que el SPD gobierne de nuevo en Bonn".

Fuentes diplomáticas

Las informaciones de Die Welt tienen todos los indicios de proceder de fuentes diplomáticas. Durante su visita a Moscú, el candidato socialdemócrata estuvo acompañado siempre por el embajador de la República Federal de Alemania en la Unión Soviética, que informó, como es habitual en estos casos, al Ministerio ole Asuntos Exteriores en Bonn sobre el contenido de las conversaciones.

Todo parece indicar que el diario derechista de Bonn ha tenido acceso a este informe diplomático. Die Welt cita extensamente fuentes de "fiabilidad garantizada". No sería extraño que dentro de la campaña electoral, que se presenta extraordinariamente sucia, desde el Gobierno federal se intente presentar a Vogel como el hombre de Moscú.

La sema na pasada, el ministro de Exteriores, el liberal Hans Dietrich Genscher, y el de Defensa, el democristiano Manfred Woerner, acusaron a Vogel de actuar contra los intereses nacio nales.

Las informaciones de Die Welt dan más interés a la visita de Gromiko a Bonn. El ministro de Asuntos Exteriores soviético tendrá ocasión de clarificar la propuesta de paz soviética conocida como iniciativa Andropov. Para hoy está anunciada una conferencia de Prensa de Gromiko en Bonn.

Según las revelaciones de Die WeIt, Andropov expresó su esperanza a Vogel de que el SPD retorne al poder después del 6 de marzo. El secretario del Comité Central del PCUS, Boris Ponomariov, fue más lejos y destacó el papel importante que le corresponde al SPD "para influir sobre la opinión pública en Estados Unidos, en la Alianza Atlántica y también en la RFA sobre los temas de desarme y control de armamentos".

Oscura oferta

El informe que cita el diario de Bonn deja muy oscura la oferta de Andropov. No está claro que la URSS esté dispuesta a destruir los SS-20.

Andropov dijo a Vogel que una parte de las armas soviéticas será destruida, y otra desmontada y trasladada al Lejano Oriente como equilibrio frente a las nuevas bases de Japón". Andropov se refirió a armas y no mencionó los tipos de cohetes, según Die Welt.