Amargura y humor en una burla social
Vi esta obra hace años en el modesto local del Nuevo Gru po en Caracas: un garaje acon dicionado. Me pareció, y me si gue pareciendo hoy, una obra excelente. Cabrujas es uno de los mejores autores de teatro de lengua castellaria (Aquí se vio su obra El día que me quieras: tuvo, por las fechas, menos público del que merecía su calidad); es también autor (aunque no en esta representación) y director de escena. Como actor iba a actuar en La Revolución, de Isaac Chocrón, que ha en contrado dificultades en el Centro Cultural: es lamentable que nos quedemos sin ver esa obra y a Cabrujas interpretándola.
Una gran riqueza
Acto Cultural, de José Ignacio Cabrujas
Intérpretes: Nuevo Grupo, de Caracas, con Rafael Briceño, María Cristina Losada, Fausto Verdial, Manuelita Zelwer, Ricardo Salazar, Tania Sarabia. Escenografía: José Luis Gómez Fra. Dirección: José Ignacio Cabrujas. Estreno: Centro Cultural do la Viga de Madrid.
Acto cultural tiene una gran riqueza. Es la burla de las pequeñas sociedades culturales de provincias (burla tierna, a favor), mezclada con la amargura de una vida diaria insatisfactoria. Es, dentro de ese acto cultural provinciano que remeda, una parodia de una representación con el terna de Colón, su lucha, su partida, su desembarco: con continuos comentarios irónicos.Y también el monólogo desgarrado, ácido, de cada uno de los miembros de la directiva cuando reflexiona sobre su propia vida y su función. Tres planos simultáneos, interpenetrados, con mucha sabiduría, con un lenguaje de literatura teatral y con un elevado sentido del humor.
La dirección está naturalmente hermanada, con la creación literaria, puesto que son de la misma persona, y Acto cultural sale muy bien. Hay mucha identidad entre lo que Cabruj as relata de la vida provinciana de Venezuela y lo que aún vive en algunos puntos de la geografía española yen los rasgos de los personajes.
La interpretacion es excelente. Necesariamente sobreactuada por la farsa, por la parodia, pero contenida y humana.
Tiene poco público -Cabrujas no tiene suerte en España-, quizá por falta de difusión de su importancia y de su calidad teatral. El que va, se divierte, recibe bien el contenido profundo de la obra y aplaude con calor.
Babelia
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