Londres afirma que sus barcos controlan el estrecho que separa las dos principales islas del archipiélago

Una fragata británica atacó en la madrugada de ayer -noche en las Malvinas- a un barco argentino en el estrecho de San Carlos, que separa a las dos islas mayores del archipiélago. Se desconoce si alcanzó el blanco. El encuentro muestra la audacia de la flota británica en su acoso de las tropas argentinas en las islas y la poca respuesta que ha encontrado hasta el momento por parte de éstas.

La fragata -la Alacriky, del tipo 21 y de la clase Amazón, según la agencia Press Association- y otras fragatas se habían aventurado- en esta zona en los tres últimos días. Ayer, acompañada de buques de apoyo, detectó al navío argentino y disparó con su cañón de 114 milímetros, según el portavoz del Ministerio de Defensa. "No tenemos pruebas absolutas de que el barco fue alcanzado o hundido. Sólo puedo decir que hubo informes de una gran explosión, posiblemente porque se hubiera alcanzado el depósito de combustible. No tenemos informes de que el barco argentino contestara a este disparo", añadió.El portavoz agregó que "el incidente y su localización muestra cuán cerrada es nuestra garra sobre las islas". Algunos comentaristas británicos apuntaron que las dos islas han quedado logísticamente separadas para los argentinos. Para el Ministerio, el barco argentino estaba "probablemente allí" desde antes del bloqueo y podría tratarse de un patrullero. Según corresponsales de la televisión británica a bordo del portaviones Hermes podría ser un buque de suministros que traía asimismo refuerzos de tropas. Según estas fuentes, el helicóptero de la fragata disparó ráfagas de ametralladora contra las costas para forzar a los argentinos a responder y localizarlos. Pero nada ocurrió.

"El hecho de que estemos negociando (en la ONU) no cierra las posiciones militares", aseguró la primera ministra, Margaret Thatcher, en el Parlamento durante el último recuento oficial del destacamento. Este cuenta con 63 barcos: quince buques, doce auxiliares y 46 navíos requisados. En esta cifra no se cuentan ni los submarinos, ni el destructos Exeter, ni tres nuevas fragatas (Minerva, Actieve y Avenger) que con las matrículas, tapadas y equipadas con misiles Exocet zarparon el lunes con rumbo desconocido.

El lujoso crucero Queen Elizabeth 2 zarpará "probablemente hoy" con 3.000 hombres a bordo.

La danza diplomática se prosigue en las Naciones Unidas, donde, según el Foreign Office, "la situación es claramente crítica. Las conversaciones están ahora centradas en algunas cuestiones fundamentales, pero aún queda mucho camino por recorrer". Oficialmente, Londres no está dispuesto a aceptar un alto el fuego que no venga acompañado de una pronta retirada argentina, ni una soberanía argentina de: las islas fijada de antemano. La víspera, el titular del Foreign Office, Francis Pym, había indicado que "nunca hemos considerado que las islas sean británicas por definición. Otras formas. de Gobierno son posibles". Por cuatro veces durante las interpelaciones a la primera ministra, el líder laborista Michael Foot se levantó para pedirle que el Gobierno no tomara una decisión definitiva sobre estas negociaciones sin el consentimiento de la Cámara de los Comunes.