El embajador polaco en Washington denuncia "brutales violaciones de los derechos humanos" en su país

Romuald Spasowski, embajador de Polonia en Washington, pidió el domingo asilo político en Estados Unidos. Escoltado por agentes de la policía federal, FBI, Spasowski anunció a media tarde del domingo, en un patético comunicado ante la Prensa, que no podía "permanecer callado" frente a la "brutal violación de los derechos humanos" por parte del Gobierno de Polonia.

Fue el secretario de Estado Alexander Haig quien reveló ante las cámaras de la cadena de televisión CBS la decisión del embajador polaco de pedir asilo político en EE UU, inmediatamente concedido por el propio presidente Ronald Reagan para Spasowski, de 61 años de edad, su esposa, su hija y su yerno.La determinación del embajador polaco, que pidió acciones idénticas para sus colegas en el mundo, fue considerada por el presidente Ronald Reagan como un ejemplo más de la seria situación que vive actualmente el pueblo polaco. El portavoz de la Casa Blanca, Larry Speakes, confirmó al mismo tiempo que Washington desea la máxima coordinación entre los aliados frente a la crisis polaca, para lo cual Estados Unidos ha enviado una delegación a varias capitales de países de la OTAN, dirigida por el subsecretario del Departamento de Estado para Asuntos Europeos, Lawrence Eagleburger.

Polonia continua centrando la atención de los responsables de la política exterior de la Administración Reagan, con afirmaciones del secretario de Defensa, Caspar Weinberger, que calificó la "lección de Polonia" como un ejemplo para que la República Federal de Alemania reconsidere la aplicación de su reciente acuerdo de gaseoducto transiberiano con la URSS.

Emocionado, pero con voz calmada y acompañado de su esposa, el embajador de Polonia en EE UU declaró ante los periodistas reunidos en el Departamento de Estado, que su patria estaba sometida por los militares a una "noche cruel de oscuridad y silencio".

"Yo no puedo asociarme", añadió el embajador, "con las autoridades responsables de esta brutalidad e inhumanidad de campos de concentración, donde centenares de polacos están detenidos en condiciones infrahumanas, al aire libre, sin protección ni comida, bajo temperaturas glaciales".

Romuald Spasowski -que debía regresar a Polonia en el verano próximo, al término de su mandato normal en Estados Unidos- justificó su acto en "señal de solidaridad" con el líder sindical Lech Walesa. Por orden del presidente Reagan, Romuald Spasowski y su familia permanecen en una residencia secreta en Estados Unidos, bajo protección de agentes del FBI. Por otra parte, según el diario de neoyorquino Daily News, el vicecónsul de Polonia en Nueva York, Ted Kondratowicz, también solicitó por su parte asilo político en EE UU.

Decano de los embajadores polacos, Romuald Spasowski era embajador de Polonia en Washington desde 1978, cargo que ocupó anteriormente durante el período 1955-1961, en plena época de guerra fría entre el Este y el Oeste. Es miembro del Partido Comunista polaco y católico practicante.

Spasowski fue subsecretario de Asuntos Exteriores en Varsovia y encabezó cinco delegaciones diplomáticas polacas en el exterior.