Obras de restauración en dos puertas de la catedral de Valencia

La catedral de Valencia ha cerrado la puerta barroca de Los Hierros para proceder a su restauración dentro de las obras que se vienen realizando los últimos años en su exterior. En contra de determinadas informaciones sobre el cierre de la conocida puerta gótica de Los Apóstoles, bajo cuyos arcos el Tribunal de las Aguas resuelve cada siete días litigios entre huertanos, fuentes solventes las desmintieron, ya que su restauración se emprendió tiempo atrás, debido a que está afectada por el mal de piedra.La puerta de Los Hierros es famosa por encontrarse junto al Miguelete, hecho que la hace aparecer en las reproducciones fotográficas de la simbólica torre valenciana. Iniciada por un alemán a principios del siglo XVIII, continuó la obra el valenciano Francisco Vergara, a partir de 1713. Su conjunto escultórico posee un Importante movimiento interno afín a los espacios que creaba en su época Brunelleschi. Para mantener un espacio entre la calle y la fachada se rodeó con una verja barroca, de ahí su nombre. Su cierre temporal no afecta al ritmo normal de acceso a la catedral, ya que cuenta con otras dos puertas, la gorita y la románica del Palau. restauradas recientemente.

Fuentes próximas a la Dirección General del Patrimonio en Valencia señalaron que los conjuntos escultóricos de la puerta de Los Apóstoles se encuentran deteriorados por el mal de piedra, que afecta al tipo de caliza con que se levantaron. Frenar este deterioro es de difícil solución, si bien su restauración comenzada en 1967 ha permitido que no se agudizara. Entonces se levantó una fuerte polémica entre los partidarios de replicar a los doce apóstoles con copias de ahora, debate que se resolvió a favor de mantener las viejas figuras, aunque parte de ellas se trasladaron al museo catedralicio para una mejor conservación.

La restauración de la catedral se proyectó a partir de 1966 con ayudas iniciales del erario municipal y de la Caja de ahorros. La presencia en el Ministerio de Educación y Ciencia y Vivienda de aquella época de dos valencianos, Villar Palasí y Mortes Alfonso, facilitó el apoyo de la Administración central para descubrir la estructura interna del edificio y remodelar el exterior de las fachadas y cubiertas. Estas obras externas prácticamente están concluidas y resaltan enormemente en el conjunto de la zona peatonal abierta en sus inmediaciones, hecho que le convierte en uno de los puntos de encuentro más concurridos de la ciudad.

La fase actual corresponde a la eliminación del revestimiento barroco de la nave central que ocultó durante años y años una brillante arquitectura gótica. La euforia neoclásica de fines del siglo XVIII llevó a ocultar todo el gótico del templo, eliminar las capillas laterales por otras y los retablos de pintores primitivos.