El presidente defiende el aumento de gastos militares

Después de la lluvia de botellas sufrida en Miami, el presidente Carter pronunció el martes un importante discurso ante la asociación de alcaldes de Estados Unidos, reunida en Seattle, en el Estado de Washington. En su mayoría, demócratas y partidarios de Carter, los alcaldes de las grandes ciudades norteamericanas han manifestado, sin embargo, desde hace unos meses, un pronunciado espíritu crítico hacia la Casa Blanca.«Tengo la intención de restablecer nuestra autoridad económica sin dar la espalda a los pobres, a los ancianos y a los débiles», declaró el presidente ante los responsables municipales. «Rechazo las promesas fáciles de reducción masiva de impuestos y de supresión arbitraria de proyectos gubernamentales. Tales expedientes sólo son falsas escapatorias y un sin sentido desde el punto de vista ideológico», añadió Carter en una clara alusión a las propuestas económicas de Ronald Reagan, su rival republicano cara a la reelección presidencial.

«No podemos construir la prosperidad sin justicia y sin compasión», dijo el presidente. Carter defendió también un importante aumento de los gastos militares que son «esenciales», explicó, «para reforzar nuestra defensa colectiva con la OTAN y para responder a la agresión soviética en Afganistán. Muchos de entre ustedes han expresado su inquietud personal ante este aumento de gastos militares, pero estoy decidido a ir adelante por nuestra inmensa necesidad de seguridad nacional».

Los efectos de la recesión económica que sufre este país dañan directamente a las ciudades norteamericanas, para las cuales el senador demócrata Edward Kennedy ha pedido recientemente un plan Marshall, semejante al que ayudó a reconstruir Europa después de la segunda guerra mundial.