Representaciones de "Hamlet", en versión catalana de Terenci Moix
El Teatre Itinerant Catalá (TIC) viene presentando desde el pasado 1 de junio la versión catalana que Terenci Moix ha realizado de William Shakespeare, Hamlet.
La representación tiene lugar al aire libre, en el marco de la plaza del Rey, en el centro del barrio gótico barcelonés. A partir del 15 de Junio, la compañía iniciará una serie de representaciones en varias ciudades catalanas para, con toda probabilidad, volver a Barcelona dentro de la temporada de verano que el Ayuntamiento organizará en el teatro Griego de Montjuich.«Aspiro a proponer a Cataluña», escribe Terenci Moix en la presentación del espectáculo, «una lectura nueva de una obra que, a menudo, nos ha llegado deformada por falsas lecturas neorrománticas.»
Según Terenci Moix, tanto la traducción como el montaje de Pere Planella -uno de los directores del Teatre Lliure- pretende sistematizar para el futuro una lectura de Hamlet que corresponda a las aproximaciones y polémicas habidas sobre el personaje
La versión que se presenta en la plaza del Rey, en síntesis, es la misma que se ofreció al público catalán a través de la programación catalana de TVE, el pasado 16 de abril. Sin embargo, en la plaza del Rey se destacan mucho más los aspectos extra vertidos de Hamlet, en detrimento del tratamiento más interiorizado del personaje que se hacía en televisión, precisamente como una exigencia del medio en que se desenvuelve la representación.
La escena se desenvuelve, básicamente, en un entarimado que se alza frente a la escalinata del salón del Tinell. El antiguo edificio es asimismo utilizado. A través de sus ventanas discurren los personajes en breves escenas que precisan de una obligada referencia en la escena central.
En la puesta en escena destaca, por las características del personaje, la labor de Enric Majo interpretando a Hamlet. Igualmente, destacan Marta Angelat (Ofelia) y Josep Torrents (Laertes).
La representación tiene su principal enemigo en las consecuencias del lugar escogido para la puesta en escena. En efecto, la plaza del Rey, pese a estar enclavada en una zona de circulación rodada restringida, no consigue librarse de innumerables ruidos que imposibilitan escuchar con claridad todo cuanto se dice en la escena. Ello haría exclamar a Terenci Moix al finalizar el espectáculo el día de su estreno: «En este país sólo se cierran las calles al tránsito cuando gana el Barça. Para los artistas, sin embargo, trabajar es de locos.»
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