La planificación ecológica del territorio

El reto que le plantea al hombre del siglo XX un desarrollo armónico desde el punto de vista ecológico, dista mucho de haber sido resuelto de forma satisfactoria.. La contaminación, bajo todas sus formas, y el progresivo deterioro de nuestro medio ambiente natural demuestran bien a las claras que el desarrollo que nos ofrece la vida moderna ha sido obtenido, al menos hasta ahora, considerando solamente factores económicos o políticos.En estos últimos años, un nutrido grupo de profesionales ha ido desarrollando una serie de técnicas de planificación del territorio que intenta considerar de una forma integrada todos los elementos presentes en el problema, incluyendo, y ésta es la novedad, los factores ecólógicos. Es indudable que si las medidas correctoras parecen difíciles, las medidas preventivas son en cambio el arma más eficaz que tenemos para corregir muchos de los desequilibrios ambientales producidos por una planificación y un desarrollo muchas veces caóticos y anti-ambientales. Y la más eficaz de estas medidas preventivas es, por supuesto, la planificación ambiental del desarrollo.

Acaba de ser publicado el primer libro que resume todas las técnicas de vanguardia a este respecto. Domingo Gómez Orea, profesor universitario e ingeniero agrónomo, ha resumido en dos tomos de amena lectura, pero con densidad de contenido, las lecciones que dictó a lo largo de un curso del CIFCA (Centro Internacional de Formación en Ciencias Ambientales) sobre el tema de la planificación ambiental. Es este el primer intento, creo que no sólo a nivel nacional sino a nivel internacional, de recopilar todos los conocimientos modernos sobre el apasionante tema del enfoque de la planificación teniendo en cuenta precisamente aquello que hasta ahora se había despreciado: la dimensión ambiental del desarrollo.

En los dos tomos del libro, Gómez Orea analiza las relaciones entre el medio ambiente y los recursos naturales en la planificación, desarrollando en cuatro capítulos muy extensos los diversos pasos de un trabajo de estas características: el inventario y la clasificación, la valoración de la calidad del medio, la predicción de los impactos ambientales, y, por último, la generación de alternativas. El segundo tomo concluye con dos ejemplos de planificación del medio físico, uno de ellos la planificación restrictiva en una zona del entorno de Málaga (protección del medio físico), y el otro un modelo de asignación de usos de suelo para la planificación de áreas rurales.

Hay que señalar que los dos tomos de la obra de Domingo Gómez Orea, con algo más de trescientas páginas en total, suponen una aportación seguramente inestimable, y por el momento única, en el terreno de la planificación ecológica La densidad de la obra, la puntillosidad de las explicaciones, la suave aridez de muchos de los temas tratados en profundidad, y la misma temática del líbro hacen de esta obra un manual imprescindible para todos aquellos profesionales (economistas, ingenieros, geólogos, biólogos, geógrafos, climatólogos, y, en general, especialistas de las diversas materias implicadas en la planificación) que, directa o indirectamente, realizan trabajos relacionados con el desarrollo y el planeamiento; en cambio, el gran público encontrará, por las mismas causas citadas, ciertas dificultades al abordar la lectura de este libro, cuyo interés es indudable para todo el mundo, pero cuya profundidad de análisis puede ser un obstáculo para una comercialización generalizada. Objetivo que, por otra parte, seguramente no persiguen ni el CIFCA, con la edición de sus Cuadernos, ni Domingo Gómez Orea, con su trabajo especializado.

En suma, una obra importante, por ser la primera que recoge toda la moderna problemática de la, planificación ecológica, absolutamente imprescindible para el especialista y muy recomendable para todos los profesionales que, aunque sea de lejos, se interesan por los problemas que, a modo de reto, nos plantea un desarrollo armónico, sin crispaciones medioambieñtales, y conjugando los factores clásicos (esencialmente económicos), con los más recientes (fundamentalmente ecológicos).