"Tenemos que comprender que la protección a la cultura no es una necesidad secundaria"

«Aunque el Ministerio de Cultura no es responsable de la custodia de estos bienes, no puede por menos que ser sensible ante acontecimientos de este tipo», declaró a EL PAIS el ministro de Cultura y Bienestar, Pío Cabanillas, al serle requerida su opinión sobre el robo de la Cámara Santa de la catedral de Oviedo, efectuado en la madrugada del pasado miércoles.El señor Cabanillas, que como el resto de los ministros del Gobierno disfruta de unas cortas vacaciones, ha seguido desde el primer momento la evolución de los acontecimientos relacionados con el robo, y poco después de conocer la noticia envió al cardenal Jubany, arzobispo de Barcelona y presidente de la Comisión de Liturgia de la Conferencia Episcopal (encargada, entre otras cosas, de la conservación de los bienes de la Iglesia) un telegrama en el que expresaba su sentimiento de repulsa ante el hecho y le brindaba la colaboración de su Ministerio para la posible recuperación de las joyas.

Sobre el tema de la seguridad de nuestro patrimonio artístico y cultural, Pío Cabanillas respondió lo siguiente: «El Ministerio de Cultura, y yo personalmente, tenemos una gran preocupación por este tema, que, en efecto, es índice de la necesidad absolutamente apremiante, y que no ha sido afrontada hasta el momento, de reforzar las medidas que garanticen la conservación de nuestro Patrimonio. Desgraciadamente, la equivocada política de competencias exclusivas, a la que precisamente se ha querido dar respuesta con la creación del Ministerio de Cultura y Bienestar, ha impedido hasta hoy una acción conjunta, que sin duda es el único medio eficaz para conseguir la debida protección.»

«Por otra parte -prosiguió el señor Cabanillas- la carencia de recursos y la escasez de consignaciones presupuestarias, son también elementos coadyuvantes para que concurran casos como el presente. Será deseable que en el futuro se evite y se logre hacer comprender que la protección a la cultura no es una necesidad secundaria o de último grado, respecto de la que todas las demás necesidades materiales tienen clara preferencia."

En sus declaraciones, el señor Cabanillas adelantó a EL PAIS la intención del Gobierno de enviar a las Cortes una ley de Patrimonio Artístico: «En la futura ley de Patrimonio Artístico que el Gobierno piensa presentar a las Cámaras, se intentará reforzar la protección de estos bienes, sometiéndoles a un tratamiento unitario y confiando que sucesos como el presente (el robo de Oviedo) sirvan para concienciar y atraer la atención respecto de la de los bienes culturales, no muy tomados en consideración hasta el presente, atención en la que debe estar comprometida toda la sociedad española.»

Pío Cabanillas informó, finalmente, que en la actualidad el Ministerio de Cultura y Bienestar está en contacto con el Ministerio de la Presidencia y del Interior con el fin de someter al próximo Consejo de Ministros la creación de una comisión interministerial que estudie una acción concreta y urgente sobre protección del patrimonio artístico nacional.

Nota oficial de la Dirección General del Patrimonio Artístico

Por su parte, la Dirección General del Patrimonio Artístico y Cultural, de la que es titular (pese a que presentó su dimisión hace tres semanas) Antonio Lago Carballo, facilitó en la tarde de ayer una nota oficial en la que puntualiza que las obras de restauración de la catedral de Oviedo se realizan a cargo de la Diputación Provincial de Oviedo, y que los tesoros de la Cámara Santa estaban suficientemente estudiados, inventariados y documentados. La misma nota dice que el Consejo Provincial de Bellas Artes de Oviedo ha puesto a disposición de la policía material fotográfico e información documental sobre el tesoro de la Cámara Santa.