La actriz Judith Godrèche denuncia en los premios César la “impunidad” en el cine
La ganadora de la Palma de oro de Cannes ‘Anatomía de una caída’ triunfa en la ceremonia de los galardones franceses. La española Gala Hernández López logra el trofeo al mejor corto documental con ‘La mecánica de los fluidos’
Sus palabras resonaron en una sala llena, al igual que encontraron eco en la sociedad francesa en los últimos días. La actriz Judith Godrèche, que a inicios de febrero denunció a dos cineastas por haberla violado siendo adolescente, criticó este viernes “la impunidad” que impera en el séptimo arte. Su presencia en la 49ª edición de los premios César, la ceremonia del cine francés en la que triunfó Anatomía de una caída, de Justine Triet, era muy esperada. Durante un breve aunque ovacionado discurso, exhortó al mundo audiovisual francés a asumir su responsabilidad ante los abusos que se cometieron contra intérpretes menores de edad.
“¿Será posible que miremos la verdad a la cara? ¿Que asumamos nuestras responsabilidades? ¿Ser los actores de un mundo que se cuestiona? Hace tiempo que hablo y hablo, pero no los escucho, o los escucho apenas. ¿Dónde están? ¿Qué dicen?”, preguntó la actriz de 51 años, en un certamen que se celebró bajo la sombra de nuevas acusaciones de violencia sexual. “¿Por qué aceptar que este arte que nos une sea utilizado como un tráfico ilícito de chicas?”, cuestionó.
La ceremonia premió con seis galardones al drama judicial Anatomía de una caída, incluido el de mejor película y actriz principal, para Sandra Hüller. Su directora, Justine Triet, se convirtió además en la segunda mujer en ganar el premio a mejor realización en la historia del cine francés, después de Tonie Marshall en 2000. En mayo, ya había sido la tercera mujer en la historia en ganar la Palma de oro del festival de Cannes. La única española nominada a los César, la cineasta Gala Hernández López, ganó el trofeo al mejor corto documental con La mecánica de los fluidos. El reino animal, de Thomas Cailley, logró cinco estatuillas. El premio de honor lo recibieron el director Christopher Nolan y la actriz Agnès Jaoui.
“Quiero dedicar este César a todas las mujeres”, declaró Triet tras recibir los galardones. Y añadió: “A las que se sienten atrapadas en sus elecciones, en su soledad, a los que existen demasiado y a las que no existen lo suficiente, a las que triunfan y a las que fracasan y, por último, a las que han sido heridas y se han liberado hablando. Y a las que no pueden”.
LA MÉCANIQUE DES FLUIDES #César2024 du Meilleur Film de Court Métrage Documentaire pic.twitter.com/WKGGEnisy9
— Académie des César (@Les_Cesar) February 24, 2024
Sus declaraciones fueron un guiño a las de Godrèche, que en las últimas semanas se convirtió en protagonista de una suerte de segundo MeToo en el país. El testimonio de la intérprete volvió a sacudir un sector que ya estaba convulsionado por las denuncias de violación y agresiones sexuales contra Gérard Depardieu. El actor también ha sido acusado públicamente de violencia sexual por una quincena de mujeres y ha encarado duras críticas por sus comentarios misóginos.
El testimonio de Godrèche evidenció otro tipo de abusos. Los que se cometen o se han cometido contra chicas menores de edad, bajo pretexto de ayudarlas a abrirse paso en el mundo del cine. A ella le pasó cuando conoció al director Benoît Jacquot. Apenas tenía 14 años cuando inició una relación con este cineasta, que entonces tenía 39. “Acabo de darme cuenta. Esta cosa, el consentimiento, nunca lo di. No. Nunca jamás”, declaró en una carta a su hija. A inicios de febrero, tras estrenar poco antes una serie televisiva en la que contaba esta etapa de su vida, lo denunció por violación de menor. Lo hizo también el mismo día contra otro realizador de la misma generación, Jacques Doillon.
Con sus palabras, la actriz abrió las puertas a acusaciones de otras intérpretes contra ambos directores, que rechazan los hechos. Una de ellas, Isild Le Besco, denunció el “dominio destructivo” que ejerció Jacquot sobre ella, cuando tenía 16 años. En su intervención durante la gala de los César, Godrèche, que fue una de las primeras en denunciar un intento de violación por parte del productor Weinstein en 2017, aseguró haber recibido más de 2.000 testimonios en cuatro días, en un correo electrónico que creó expresamente para ello. No concretó el contenido de los emails.
“Ceguera colectiva”
El cine francés ha vivido “una ceguera colectiva” que “ha durado años”, denunció la ministra de Cultura, Rachida Dati, en una entrevista publicada este viernes, siete años después del inicio del movimiento MeToo en Estados Unidos. Godrèche “dice cosas muy simples. Nos está diciendo: ‘Era una niña. Todos lo vieron y nadie dijo nada”, añadió. La relación no era secreta y gozó incluso de tolerancia en una sociedad que, hoy en día, se mira a sí mismo en el espejo.
Decenas de personas se manifestaron antes de la gala, celebrada en la sala Olympia de París, convocados por sindicatos y asociaciones feministas. Entre ellas estaba la actriz Anna Mouglalis, quien acusó a Doillon y al realizador Philippe Garrel de agresiones sexuales, antes de declarar estar “muy feliz de que este movimiento exista”.
Francia ha mantenido una relación compleja con el MeToo. En 2018, una tribuna firmada por 100 artistas e intelectuales francesas, entre ellas la actriz Catherine Deneuve, reivindicó la “libertad de importunar” indispensable para la libertad sexual y alertó sobre las repercusiones que el nuevo clima podía tener en la producción cultural. Las cosas, desde entonces, han ido por otro rumbo, como en 2020, cuando la actriz Adèle Haenel sacudió al sector al gritar “La honte!, la honte!” (¡Vergüenza!) y abandonar la sala cuando se anunció que el César a la mejor dirección iba para el director Roman Polanski.
Desde entonces, la multiplicación de denuncias y testimonios de violencia sexual han obligado al mundo del cine a realizar un ejercicio de introspección. ¿Qué ha cambiado? Hace un año, la Academia del cine prohibió la participación en la gala de cualquier profesional acusado o condenado por hechos violentos. La organización también empezó un proceso de renovación tras las críticas de falta de paridad y diversidad.
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