‘Relic’: Oscuro viaje a la muerte y la demencia
La película sitúa a su autora entre la sorprendente nueva ola de directoras que están revisando el cine de terror desde una mirada de género
La ópera prima de la australiano-japonesa Natalie Erika James es una perturbadora alegoría sobre vínculos familiares, la demencia senil y la muerte. La película, que sitúa a su autora entre la sorprendente nueva ola de directoras que están revisando el cine de terror desde una mirada de género, habla de tres mujeres —una abuela, su hija y su nieta, interpretadas respectivamente por Robyn Nevin, Emily Mortimer y Bella Heathcote— que se ven enfrentadas al íntimo terror de la descomposición del cerebro y de la vida. O algo parecido que se apodera de ellas y de la casa donde todo ocurre. La historia empieza cuando la abuela desaparece de su hogar en medio del campo y las dos descendientes acuden en su búsqueda. Allí, una extraña presencia en forma de moho se irá aproximando a ellas.
Natalie Erika James logra hacer una película tan inquietante como abierta a interpretaciones sobre el poderoso vínculo madre-hija. Un terror psicológico en el que la demencia senil de la anciana desempeñará un papel fundamental. Mientras la muerte acecha a la abuela, la hija y la nieta se ven atrapadas por los tentáculos de esa incontrolable putrefacción que sube por las paredes. La casa como extensión del propio cuerpo o como un cuerpo vivo que se apaga con nosotros. La película echa mano del terror clásico (el hogar como monstruo) pero desde una mirada que no teme la abstracción del pánico mental y sus oscuras metáforas. Sin sustos gratuitos, pero con un miedo sin pausa, Relic contagia esa tensión que trepa por las paredes de una casa en plena metamorfosis. La película tiene algunos ecos satánicos que no acaban de encajar del todo y un final extrañísimo cuya poderosa ternura casi parece remitir al círculo que se abre y se cierra en el útero materno.
Relic
Dirección: Natalie Erika James.
Intérpretes: Emily Mortimer, Bella Heathcote, Robyn Nevin, Steve Rodgers, Chris Bunton.
Género: terror. Australia, 2020.
Duración: 89 minutos.
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