Los museos tendrán su marca de calidad en España
El Instituto de Calidad Turística impulsa una norma pionera en la que se han implicado más de 40 instituciones culturales
Los cerca de 1.600 museos y colecciones que se reparten por España se preparan para un nuevo control de calidad. Será una experiencia pionera en el mundo y garantiza cara al público la prestación de unos servicios que distinguirán a unos de otros. A partir de 2019 quienes luzcan en sus fachadas la nueva marca llamada sello Q pertenecerán a un club aparte.
Este lunes presentan la iniciativa en el Museo Sorolla el ministerio de Cultura y el de Industria Comercio y Turismo. Parte del Instituto de Calidad Turística (ICTE) y pretende mejorar las prestaciones en ese ámbito cara al usuario, pero sobre todo al visitante nacional y extranjero. El turismo cultural es uno de los atractivos más poderosos para que este sector incremente sus cifras en torno al 5% cada año. Y gran parte de la culpa recae en los museos: “Son desde luego muy responsables de este crecimiento exponencial”, afirma Miguel Mirones, presidente del ICTE.
Por ello, el organismo de carácter público y privado se puso a trabajar en una norma publicada el pasado septiembre en el Boletín Oficial del Estado(BOE). Aborda, según el propio nombre de la disposición, “requisitos para la prestación del servicio de visitas en los museos”. El primero que ciumple las características es el MARQ de Alicante y su sello Q le será entregado el próximo martes.
“Los museos son desde luego muy responsables de este crecimiento exponencial del turismo”, afirma Miguel Mirones, presidente del ICTE.
Bajo el manto del ministerio de Cultura –concretamente de la subdirección general de Museos Estatales- se han implicado en su elaboración a lo largo de 15 meses más de 40 instituciones del ámbito museístico, entre las que se encuentran el Prado, el Reina Sofía, el Thyssen-Bornemisza, el Lázaro Galdiano, el Guggenheim de Bilbao, el MACBA y el Picasso en Barcelona, la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia o el Museo de la Evolución Humana en Burgos...
La nueva disposición establece los requisitos que los museos e instituciones afines reconocidos en la legislación sectorial -colecciones, colecciones museográficas, exposiciones museográficas y centros de interpretación- deben cumplir en la prestación de sus servicios de visita y actividades complementarias para garantizar, facilitar y enriquecer la experiencia del visitante.
Contiene tres apartados. El primero está dedicado a las obligaciones de la dirección del museo en relación al sistema de gestión de la calidad. En él, se incluyen aspectos como el establecimiento de unos objetivos, los recursos humanos o el compromiso con una mejora continua. El segundo se refiere a la prestación del servicio e incluye requisitos y recomendaciones sobre accesibilidad, información y comunicación. También atención al visitante, reserva y venta de entradas, visita o fidelización de los usuarios. Según este, “el museo debe asegurar que los contenidos sean claros, comprensibles y estén ubicados de forma coherente para que el visitante pueda orientarse e informarse adecuadamente”, señalan en el ICTE.
Por último, el tercer apartado, trata de la gestión de las instalaciones y equipamientos o incluye aspectos como la claridad en las señales o la seguridad, el espacio expositivo, los aseos, la zona comercial y aparcamiento.
El Instituto de Calidad Turística ha promovido hasta el momento 22 normas similares en diferentes campos que van de hoteles, a balnearios, agencias de viaje, parques naturales, playas o bodegas. Según Miguel Mirones, “la calidad en la gestión turística debe necesariamente incluir valores como la sostenibilidad, la accesibilidad y el respeto al medio ambiente y convertirse en el eje fundamental del diseño de las políticas turísticas futuras para España”. Ahí entran de lleno las instituciones culturales: “El hecho de que los principales museos españoles se hayan sumado a esta propuesta promovida por el ICTE, pone de manifiesto en primer lugar, que los agentes del turismo cultural son muy conscientes del importante papel que les toca desempeñar en el futuro del turismo español y que apuestan claramente por jugar dicho papel apoyándose en la calidad como principio fundamental de su actuación”.
El Reina Sofía ha mostrado su buena acogida a la norma:“Hemos participado activamente en las reuniones técnicas de elaboración de la norma para compartir nuestra amplia experiencia en atención al visitante. Es fundamental pensar los museos desde quien acude a ellos, y no sólo desde las colecciones o las exposiciones”, asegura Carmen Castañón, asesora de dirección. “El proceso de autoevaluación y mejora continua que forma parte de la norma es una herramienta muy valiosa. Tenemos la suerte de ser uno de los grandes museos nacionales y entre los más visitados año tras año. Eso nos proporciona una gran experiencia a la hora de identificar y definir parámetros necesarios de la prestación del servicio de visitas. Conocemos a nuestros visitantes, empleamos técnicas de big data, empeñados continuamente en que regresen y para atraer nuevos públicos”, agrega.
Desde el Thyssen-Bornemisza, Vicente Pérez, responsable de servicios generales y atención al público, afirma: “Es necesario crear un marco que acote y certifique la calidad de las visitas. Entre 1.600 museos debemos ser exigentes con ciertas normas. Quien acuda a nuestros recintos y vea la marca Q en la puerta sabrá que en el museo no sólo disfrutará de la experiencia de contemplar obras de arte u otros tractivos, también tendrá la seguridad de que va a sentir una experiencia de trato y con garantías mucho más completa”.
Babelia
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