Al menos 40 cargos sanitarios se subieron el sueldo en plenos recortes
Entre los gestores que aumentaron sus retribuciones están centros públicos, concertados y entidades de base asociativa
Los recortes que asolaron la sanidad catalana no pasaron factura a los altos cargos de los centros sanitarios públicos y concertados. Al menos, no a todos. Según la documentación a la que ha tenido acceso EL PAÍS, solicitada a través de la Ley de Transparencia, al menos 42 gestores de la red sanitaria pública se subieron el sueldo entre 2014 y 2016. Esos años coinciden, precisamente, con la última época de los tijeretazos que ejecutó el Gobierno de Artur Mas y que dejó al Departamento de Salud con 1.500 millones de euros menos de presupuesto, las listas de espera disparadas y hasta 2.400 profesionales menos.
Desde que Artur Mas se puso al frente del Govern, a finales de 2010, el presupuesto del Departamento de Salud se despeñó hasta tocar fondo en 2014 (8.290 millones). La partida sanitaria no remontó hasta 2017, cuando el Govern de Carles Puigdemont logró aprobar,no sin apuros, unas cuentas que empezaban a revertir levemente los recortes (la partida fue de 8.876 millones en 2017).
La austeridad marcó las políticas sociales y laborales entre 2011 y 2016. Sin embargo, no todos los estamentos se abrocharon el cinturón de la misma manera. EL PAÍS ya avanzó ayer que, entre 2014 y 2016, hasta cinco altos cargos de la sanidad concertada tenían unas retribuciones por encima de los 150.000 euros, esto es, más de lo que cobra el presidente de la Generalitat, Quim Torra. Pero además de los sueldos astronómicos de algunos altos cargos, los datos recogidos por el sindicato Metges de Catalunya (MC) a través de la Ley de Transparencia y a los que ha accedido este diario, revelan que 42 gestores de la red sanitaria pública se subieron el sueldo durante esos años. Como referencia, el salario medio de un médico oscila entre 40.000 y 55.000 euros, según el nivel de carrera profesional, explica Xavier Lleonart, presidente del sector de hospitales concertados de MC y encargado de recopilar la información.
El gerente de la Fundación Hospital Sant Bernabé de Berga, por ejemplo, pasó de tener una retribución de 96.400 euros en 2014 a percibir 101.193 en 2016. El concierto con el Servicio Catalán de la Salud (CatSalut) fue de 14,3 millones de euros en 2017.
El director general de la Fundación Puigvert, un hospital que tiene un concierto con el CatSalut de 45,2 millones, percibió en 2015 un sueldo anual de 81.451 euros. En 2016, esta cifra ascendió a 154.668. Una portavoz del centro aclara, no obstante, que esta diferencia se debe a que en 2015, el director general solo estuvo contratado seis meses y el salario estipulado en 2015 según el documento recogido a través de la Ley de Transparencia se refiere a medio año.
De centros con un alto cargo a otros con 36
En sus peticiones, MC solicitó conocer las retribuciones de “todos los cargos directivos”. El sindicato asumía que eran aquellos que aparecían en el organigrama empresarial y/o tenían responsabilidad en la gestión de personal. Algunos centros entendían que eran solo aquellos con responsabilidad financiera.
La fotografía final dibuja un panorama desigual, con centros con apenas uno o dos directivos y otros, como el Grupo Sagessa, que presenta 36 altos cargos, o Hestia Alliance, con una veintena. Pese a su tamaño, Mútua de Terrasa dijo tener solo tres.
Otro hospital vecino de la Puigvert, el hospital Sant Pau, centro de referencia para más de 400.000 barceloneses y que tiene un concierto con el CatSalut de 241,4 millones de euros, también está entre los hospitales que aumentaron el salario de su alto cargo cuando aún acechaban los recortes. El gerente pasó de cobrar 118.710 euros en 2014 a percibir 120.000 en 2016.
En el caso del Espitau Val d’Aran, por ejemplo, centro de referencia para la comarca del mismo nombre, el director general no es el alto cargo con una retribución más alta. Lo supera el director asistencial, que en esos años pasó de percibir un sueldo de 71.200 euros anuales en 2014 a recibir 77.606 en 2016.
Pero esta subida de sueldos no solo afecta a los gestores de los hospitales de la red pública. También algunos altos cargos de equipos de atención primaria han visto aumentados sus salarios. Entre 2014 y 2016, el gerente del Consorcio de Atención Primaria de Salud del Eixample Esquerra (CAPSE), que gestiona tres centros de atención primaria en el centro de Barcelona, pasó de percibir unos 73.600 euros en 2014 a 84.000 en 2016.
Las entidades de base asociativa también están en esta lista. Estas controvertidas figuras admistrativas que funcionan como una cooperativa de médicos han generado suspicacias entre algunos actores sociales que denunciaban la privatización sanitaria. En este campo, destaca, según la información recogida por el sindicato médico, la EBA Albera Salut y la EBA Muralles Salut. El gerente de Albera Salut, por ejemplo, percibió en 2014 casi 79.000 euros (30.470 por sus labores directivas y 48.153 por su papel asistencial). En 2016, esta cantidad ascendió a 80.000 euros. En su página web, Albera Salut ha colgado las retribuciones de sus trabajadores y, en 2017, el documento señala que el gerente cobró por sus servicios apenas 10.600 euros. La entidad no especifica si también ejerce como facultativo.
El consejero delegado de la EBA Muralles Salut, pasó de percibir 72.165 euros anuales en 2014 a cobrar 97.922 euros en 2016. Los mandos de los equipos de atención primaria de Osona Sud-Alt Congost, que también se gestionan a través de una EBA, tuvieron en esas fechas un incremento salarial de 6.000 y casi 4.000 euros respectivamente, superando ambos los 80.000 euros anuales.
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