Ojito con la vecina
En La cocina de mi vecina, en Malasaña, se puede disfrutar con batidos, 'cookies', magdalenas o 16 variedades de tartas
Malasaña todavía esconde algunos secretos. Y varios de ellos tienen forma de dulce, como las tartas, las magdalenas —cupcakes,como gusta decir a los modernos— o las galletas de La cocina de mi vecina (Corredera Alta de San Pablo, 15;www.lacocinademivecina.com).
Aunque el local es un clásico del barrio, hace seis años Amanda Fuentes tomó las riendas de su obrador. “Para mí La cocina nació en 2013; antes no solo se dedicaba a lo dulce”, cuenta la dueña de la pastelería-cafetería, “yo quería hacer tartas y le di una vuelta al negocio”. Fuentes, de origen brasileño, llegó a España en 2010. Al no encontrar trabajo, decidió alimentar su afición por la pastelería: “Realicé varias formaciones de respostería creativa y decidí emprender”.
Dicho y hecho. Fuentes comenzó a elaborar su imbatible receta deMuerte por chocolate(tarta con tres tipos de cacao y apta para intolerantes a la lactosa); la sugerenteRed Velvet, con base de vainilla; o la exótica e irresistiblePiña & Coco(incluso los que tengan algún tipo de prejuicio con alguno o ambos controvertidos ingredientes, deberían probarla). Así hasta 16 variedades de tartas. Empezó ella sola -“el comienzo fue muy difícil”, recuerda-, pero ahora trabaja con otras ocho personas.
“Hacemos muchos encargos para celebraciones, para eventos o para marcas”, cuenta la mano derecha de Fuentes, Cintia Perrone, desde el obrador que acaban de inaugurar (El obrador de mi vecina; San Vicente Ferrer, 66). Ahí elaboran a diario (de lunes a domingo) sus mimadas propuestas. En este último local sólo se recogen encargos; el primigenio funciona como cafetería (de domingo a jueves, de 10.00 a 22.00; hasta las 00.00 el resto de días), donde se puede desayunar, merendar, tomarse un zumo, un batido, o darse un dulce homenaje. “Los fines de semana, se pasa mucha gente a lo largo de todo el día”, añade Perrone, “incluso por la noche; hay clientes que de vez en cuando vienen a cenar tartas”.
En tres ideas
- Lo mejor... Los sabores, las texturas y todas las elaboraciones que preparan.
- Lo peor... A algunas horas del día puede estar demasiado lleno, pero como tienen la opción de prepararte las porciones para llevar, no es tanto problema.
- Ideal para ir con... Golosos de toda condición. También recomendable para los que de vez en cuando necesitan un chute de azúcar.
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