Andalucía compensará con 1.500 euros a los estudiantes que se queden sin beca

La Junta de Andalucía ofrecerá una ayuda de 1.500 euros anuales a los estudiantes de bachillerato y FP que, a pesar de cumplir con los requisitos de renta, se queden sin beca el próximo curso por el aumento de las exigencias académicas por parte del Gobierno central. La comunidad —que como Cataluña tiene transferidas las competencias para la tramitación de las subvenciones en la enseñanza no universitaria— lleva meses alertando del impacto que estaba teniendo ya este curso el endurecimiento de los requisitos académicos para acceder a las becas ministeriales. La Consejería de Educación sostiene que se han perdido 11.846 ayudas en bachillerato y FP, lo que ha supuesto para el Estado un ahorro de 18,4 millones.

La consejera andaluza de Educación, Mar Moreno, ha pedido en varias ocasiones al ministro José Ignacio Wert que suavice estos requisitos ante el daño que se estaba produciendo ya este curso. En concreto, Moreno ha reclamado que solo se exija para lograr la ayuda una nota media de un 5 (y no del 5,5 como se ha hecho por primera vez este curso). El Gobierno andaluz ha indicado este martes que, si el ministerio no accede a volver al 5 de media, "todos los alumnos de bachiller, ciclos formativos y enseñanzas de régimen especial que no consigan una beca por no alcanzar los requisitos académicos fijados por el ministerio, y que hayan aprobado", tendrán esa ayuda de 1.500 euros.

De esas casi 12.000 becas que, según la consejería, se han perdido este curso en Andalucía respecto al anterior, el mayor impacto se ha notado en las ayudas compensatorias. Se han perdido 7.278 de este tipo en la comunidad, lo que implica una reducción del gasto de 14,6 millones. En el caso del suplemento de ciudades, que compensa el coste de la vida en las localidades más grandes, la caída en las ayudas ha sido de 3.369 (682.695 euros). Por último, se han perdido 1.199 ayudas de residencia, lo que implica tres millones menos de gasto.

El plan andaluz de los 1.500 euros —cuyos detalles los ofrecerá este miércoles el presidente de la Junta, José Antonio Griñán— solo irá dirigido a los alumnos que pierdan la ayuda compensatoria. Y se aplicará a partir del próximo curso. Esos 1.500 euros equivalen a algo más de la mitad del dinero que se recibe este curso del ministerio como beca salario, algo que también parece que cambiará el año que viene. Lo que no está claro aún es el impacto que tendrá en número de beneficiarios la ayuda de la Junta. Dependerá de si el ministerio mantiene la nota media requerida en el 5,5 o de si finalmente la aumenta como tenía previsto hacer el ministro Wert hasta que han arreciado las críticas.

En el ámbito universitario también preocupa que Wert endurezca más los requisitos. Cataluña estima que 10.000 alumnos de la enseñanza superior de esta comunidad podrían quedarse sin ayuda. Ante esta situación, el secretario catalán de Universidades, Antoni Castellà, se ha comprometido este martes a reforzar el programa de becas Equitat, un paquete de ayudas autonómicas que la Generalitat activó este curso para compensar la fuerte subida del precio de las matrículas universitarias, hasta un 67%, aunque el importe depende del nivel de renta familiar. Estas becas han contado este curso con una dotación de 30 millones de euros y han beneficiado a 20.000 estudiantes.