Varios países aceptan la vigilancia por vídeo y el control de móviles tras los últimos atentados
La utilización por Scotland Yard de las imágenes procedentes de miles de cámaras en sitios públicos inspiran a varios países
Numerosos países europeos prevén, después de los atentados de Londres, otorgar a la tecnología un papel de primer orden en la lucha contra el terrorismo, en particular con un sistema de vigilancia mediante cámaras de vídeo y un control más estricto de los sistemas telefónicos. La utilización a fondo por Scotland Yard de las imágenes procedentes de miles de cámaras en las calles y los andenes del metro de la capital británica inspiraron a varios gobiernos. En la mayoría de los países, la oposición a estas medidas perdió terreno desde los atentados de Londres y Charm El-Cheij (Egipto).
El cuidado y atención a las redes de telefonía móvil, que permite obtener rápidamente informaciones tan valiosas como la persona que llamó y desde donde, también será reforzada en numerosos países. Varias capitales europeas, pedirán a los operadores de teléfonos móviles almacenar permanentemente durante un año todos los elementos de las comunicaciones: lugar de llamada y recepción, identificación de los números, duración y contenido.
La adopción de pasaportes biométricos, con sistemas que no pueden ser falsificados como las huellas dactilares, será acelerado tras los ataques londinenses y la Unión europea ya previó hacerlos obligatorios de aquí a tres años. En lo que respecta a la instalación de cámaras en lugares públicos, estas son las posiciones adoptadas en varios países
España. El Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero se ha comprometido a exigir por ley a las compañías telefónicas que almacenen durante un mínimo de un año los datos de tránsito (llamadas efectuadas y lugares desde las que se hicieron esas comunicaciones) que figuran actualmente en las facturas. Además, el Gobierno estudia desde hace un año otras modificaciones legales que han abierto un debate sobre la posible vulneración de derechos fundamentales.
Francia. El ministro del Interior anunció el lunes que se instalarán cámaras en 4.000 autobuses parisinos de aquí a fines de año, y se prepara un proyecto de ley antiterrorista con disposiciones sobre la vigilancia mediante cámaras y los datos telefónicos.
Alemania. La ciudad de Berlín y el estado regional de Brandeburgo hicieron saber que piensan agregar cámaras en los servicios de transporte público y almacenar durante más tiempo las grabaciones.
Italia. Este país, regularmente amenazado en comunicados de organizaciones terroristas, ya se han instalado un millón de cámaras, pero ha decidido instalar aún más en el metro de Roma.
Rusia. Los ataques de Londres también llevaron a Moscú a instalar una red de cámaras de vídeo en el metro.
Dinamarca. La demanda policial de mayores medios de vigilancia fue rechazada por el Parlamento.
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