El último día del año registra 18.047 nuevos casos, al nivel del anterior pico de la pandemia

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Sea ya tercera ola o que la segunda se ha encabritado después de relajarse entre el 9 de noviembre y el 10 de diciembre, los datos de este jueves, último día de 2020, muestran una propagación del coronavirus en ascenso. Con 18.047 nuevos casos notificados por las comunidades en las últimas 24 horas, este indicador está ya en los niveles del anterior pico, el que se alcanzó entre el 9 y el 11 de noviembre, cuando llegó a haber más de 21.000 en un día. Este nivel de detección de positivos no se dio, al menos en los informes oficiales, durante la primera ola, la de marzo a mayo de este año, cuando la cifra oficial nunca superó la de 10.000 positivos diarios. Pese a ello, la situación no es tan grave como en abril y mayo por dos motivos: es muy probable que entonces hubiera muchos más casos sin diagnosticar (si entonces se calculaba que se comunicaban un tercio del total, ahora esa estimación está alrededor del 70%). La otra, aún más importante, es que se trata de situaciones menos graves, como demuestra la ocupación de camas tanto de servicios generales como de intensivos en los hospitales. Estas cifras son mucho más exactas, ya que el control de ingresos es muy preciso, y en la inmensa mayoría de los casos se determina si hay coronavirus.

Con estos datos, el total de afectados en España por el coronavirus en 2020 (a falta de que las comunidades actualicen datos) es de 1.928.265 personas. Según la última ola del estudio de seroprevalencia, en realidad hay alrededor de un 10% de españoles que tienen o han tenido el coronavirus (unos 4,7 millones de personas), lo que indica el infradiagnóstico que se experimenta, y que fue mayor entre marzo y mayo.

Si se mide la incidencia acumulada en 14 días, este indicador sube a 279,51. Lleva ya días por encima del 250 que señala el riesgo extremo, y no había estado tan alto desde el 27 de noviembre, entonces en pleno descenso tras haber llegado a 529 el 9 de noviembre. En las últimas 24 horas este indicador ha subido de media un 5,3% en España, y solo en Canarias ha descendido. Todavía es mayoritariamente inferior a los valores de hace un mes, pero entonces el virus estaba en retroceso, y ahora la tendencia es la contraria.

Los fallecimientos, sin embargo, no acusan todavía esta subida. En las últimas 24 horas se han comunicado 148, o 1.139 si se toma el acumulado de los últimos siete días. Esta última cifra se mantiene por debajo de 1.200 desde el 22 de diciembre. En total, el informe de Sanidad recoge 50.837 muertes por coronavirus, aunque los cálculos del Instituto Nacional de Estadística le atribuyen como probables otras 30.000.

Tampoco los otros dos indicadores clave, ocupación de camas hospitalarias (9,4% por pacientes con covid) y de UCI (el 21,21%) reflejan el aumento, lo que indica que aunque se registran muchos más positivos, muchos son leves o asintomáticos. Pese a ello, el porcentaje de pruebas positivas es del 9,20%, lejos del 5% que indicaría un buen control de la situación.

A la expansión previsible del virus por las imprudencias de las fiestas (en diciembre se han juntado el puente de la Constitución y la Inmaculada, el puente de Nochebuena y Navidad y ahora estamos en el de Nochevieja y Año Nuevo) se suma un factor de incertidumbre: la llegada de la nueva cepa detectada en el Reino Unido, que hace al virus hasta un 70% más infectivo. Si el miércoles fueron las autoridades valencianas las que comunicaron el hallazgo de cinco casos, este viernes ha sido el Principado de Asturias el que ha notificado dos detecciones, relacionadas con un brote intrafamiliar que afecta a cuatro personas en Avilés, según ha informado esta mañana el consejero de Salud, Pablo Fernández Muñiz. También el País Vasco ha detectado seis casos, ninguno grave, que se suman a los ya identificados en Madrid, Galicia, Comunidad Valenciana y Andalucía.

La última comunidad que ha reaccionado a esta situación de avance de la pandemia, de momento, es Extremadura, que con una incidencia a 14 días de 551,56, un 37,7% más que hace siete días y más del doble que hace un mes, ha decretado el adelanto del toque de queda a las 22.00 a partir del 1 de enero (hasta hoy estaba en las 00.30) y ha reducido a un 30% los aforos en los centros comerciales y reducido los grupos de personas que se pueden reunir en las mesas de bares y restaurantes de seis a cuatro.

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