Torra responde a Sánchez que él le debe obediencia al pueblo de Cataluña

Quim Torra, presidente de la Generalitat de Cataluña, ha respondido a Pedro Sánchez -que ayer amenazó veladamente con aplicar de nuevo el artículo 155 si se "regresa a la unilateralidad, la quiebra de la legalidad y el desacato"- que él debe "obediencia al pueblo de Cataluña". En un mensaje colgado esta misma mañana en su cuenta oficial de Twitter, Torra escribe: "Querido presidente, creía haber entendido que a un problema político íbamos a buscarle una solución política. Por nuestra parte, siempre nos encontrarás en la vía de la obediencia al pueblo de Catalunya, el diálogo, la convivencia y la no violencia. Un abrazo".

Sin aludir explícitamente a la aplicación del artículo 155 de la Constitución, Sánchez planteó ayer lo que podría ocurrir si el president le lanza un ultimátum para celebrar un referéndum de autodeterminación o de lanzar un nuevo órdago al Estado, coincidiendo con el primer aniversario del referéndum ilegal del 1-O

"Dentro de la legalidad, el Gobierno está dispuesto a hablar con el Govern. Lo que tiene que hacer -afirmó- es representar a la mayoría de los catalanes que quieren acabar con esta crisis de convivencia y fractura que vienen sufriendo de unos años a esta parte", aseguró Sánchez en una rueda de prensa en Bogotá. Torra, añadió, “sabe perfectamente cuál es el camino que le depararía volver a la unilateralidad, la quiebra de la legalidad y el desacato”. 

El presidente se mostraba confiado hace pocos días en que, más allá de la "inflamada" retórica, el Gobierno catalán no vulneraría la legalidad y apostaría por gestionar el Govern de la Generalitat que ha recuperado. Sin embargo, los mensajes que llegan desde el mundo independentista apuntan a una nueva escalada de la tensión este otoño, ante la cual ha querido lanzar el mensaje de que la aplicación del artículo 155, que el PSOE respaldó en su momento, sigue expedita en caso de necesidad.

El calendario político en Cataluña tendrá este otoño al menos ocho fechas marcadas en rojo. La forma en la que el independentismo alinee esos puntos (entre los que están la Diada, el 1-O, la fundación del partido de Carles Puigdemont, el juicio a los exconsejeros o la posibilidad de adelantar las elecciones) pondrá a prueba los límites de la voluntad de diálogo del Gobierno de Pedro Sánchez, que es consciente de la escalada en la tensión. El separatismo, con el president Quim Torra a la cabeza, se ha reinstalado en el enfrentamiento en sus últimas intervenciones.