Rajoy no mintió, son las circunstancias
El Gobierno ha incumplido todo su programa social y fiscal amparándose en la crisis. Los eufemismos le han servido para enmascarar los ajustes
“Dije que iba a bajar los impuestos y los estoy subiendo. No hay ninguna contradicción. Han cambiado las circunstancias”. Lo ha dicho Mariano Rajoy esta mañana en la tribuna del Congreso y es la mejor declaración programática del ejercicio de Gobierno que ha hecho el Ejecutivo del PP desde que alcanzara el poder hace seis meses. El donde dije digo, digo ahora lo que quiero por que lo mandan las circunstancias (o Bruselas) se ha convertido en la justificación universal de todos los incumplimientos de Rajoy.
“No subiremos los impuestos”. “No habrá copago”. “No abarataremos el despido”, “No tocaremos el desempleo”, “Reimplantaremos la desgravación por vivienda”, “No habrá más sacrificios para los funcionarios”. Estos lemas fueron repetidos hasta la saciedad por los actuales miembros del Gobierno y dirigentes del PP en los meses anteriores a las elecciones generales del 20 de noviembre, e incluso cuando Rajoy ya ocupaba La Moncloa. Pero el Ejecutivo se ha desdicho de aquellas promesas casi en cada Consejo de Ministros con las mayores subidas de impuestos y los recortes sociales más brutales de la historia reciente.
El anuncio de la subida del IVA, contra el que el PP en la oposición se levantó en armas y amenazó con una sublevación fiscal, es el remate a la política de Rajoy que ha escudado en el discurso churchiliano de sangre, sudor y lágrimas para excusar su giro y sus mentiras electorales. Aquí están los principales incumplimientos:
- Subida del IVA. “Yo no soy como usted. (…) Le subió el IVA a la gente y no lo llevaba en su programa (…) Yo lo que no llevo en mi programa, no lo hago”. Rajoy a Rubalcaba, en el debate electoral (noviembre de 2011). Esta ha sido el incumplimiento más recalcitrante puesto que cuando el Ejecutivo socialista aumentó el IVA en julio de 2010, el PP hizo del rechazo a ese aumento su principal bandera electoralista, al punto que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, encabezó una rebelión institucional. Incluso cuando el PP alcanzó el poder, justificó la subida del IRPF para evitar precisamente el aumento del IVA y la penalización del consumo. Finalmente, se ha desdicho y subirá el IVA. Y lo ha hecho “tanto”, “porque no pagan los que tienen pagar”, en palabras de Cristóbal Montoro. Es decir, que encima que la incapacidad de luchar contra el fraude también sirve de justificación.
- Sueldo de los funcionarios. “Congelaré el sueldo de los funcionarios en lugar de bajarlo porque España necesita consumo e inversión” (marzo 2012). Rajoy aprovechaba la Cumbre de Seguridad Nuclear en Seúl para descartar la bajada del sueldo de los funcionarios como había hecho su antecesor José Luis Rodríguez zapatero. Ahora les suprime la paga extra de Navidad y les reduce los días libres.
-Prestaciones de desempleo. “Usted miente y está dejando caer una insidia, cosa que conociéndole no me sorprende, aunque no esperaba que fuera tan burda. No voy a modificar el seguro de desempleo” (noviembre 2011). Así le respondía Rajoy en el debate televisivo a Alfredo Pérez Rubalcaba cuando el candidato socialista le dijo que el PP tenía pensado bajar las prestaciones de desempleo. El augurio se ha cumplido. A partir del sexto mes se reduce del 60% al 50% la cuantía de las prestaciones para los nuevos perceptores
- IRPF, ahorro, IBI y desgravación de vivienda. “Quiero dejarlo muy claro para que nadie se llame a engaño. Nos vamos a oponer a cualquier subida de impuestos. Subir los impuestos hoy significa más paro y más recesión y darle un vuelta de tuerca más a la maltrecha economía de las familias y las empresas”. Rajoy en Soutomaior (septiembre de 2011). Pese a la declaración, su Gobierno anunció apenas una semana después de tomar posesión la mayor subida de impuestos directos, con un recargo en el IRPF de entre 0,7% y el 7%, según los tramos. El aumento, para 2012 y 2013, afecta a 17 millones de contribuyentes y supone 300 euros más al año para un salario medio. Las retenciones para el ahorro también suben entre dos y seis puntos, con un tipo máximo del 27%. Y aumenta el IBI, entre un 4% y un 10% para 25 millones de inmuebles. En materia de vivienda, el PP, que prometió reimplantar la desgravación fiscal para la compra, la ha retirado.
- Reforma laboral. “El PP no pretende abaratar el despido, sino promover que el contrato indefinido sea la regla general”. Twitter oficial del PP, recogiendo declaraciones a Tele 5 de Rajoy (septiembre de 2011). En febrero pasado, el Gobierno aprobaba una reforma laboral que establece el despido procedente con 20 días de indemnización por cada año trabajado con un máximo de 12 mensualidades, al tiempo que amplia las causas de despido por malos resultados financieros como caída de ventas. Las empresas también podrán modificar unilateralmente condiciones de trabajo y salarios.
- Amnistía fiscal. “Impresentable antisocial e injusta”. “Se les está diciendo a los ciudadanos que pagan que les van a subir los impuestos y a los que defraudan que se los van a perdonar”. María Dolores de Cospedal (junio de 2010). Así se refería la secretaria general del PP a una amnistía fiscal del PSOE que nunca se aprobó. Rajoy rescató el proyecto. Los defraudadores podrán ahora blanquear su dinero tributando solo por el 10% del capital blanqueado. Se les perdonan los intereses y las multas.
- Copago sanitario y tasas universitarias. “Le voy a meter la tijera a todo salvo a las pensiones públicas, a la sanidad y a la educación”. Rajoy (4 noviembre 2011). El Gobierno aprueba el 20 de abril el copago farmacéutico en función de la renta de los ciudadanos, incluidos los pensionistas que, con carácter general, pagarán el 10% del precio de las medicinas con un tope de entre 8 y 18 euros. Se restringe la asistencia sanitaria a los inmigrantes ilegales. En enseñanza, los universitarios deberán pagar entre el 15% y el 25% del coste real de la titulación (ahora pagan el 15% de media), y se aumenta el número de horas lectivas para los profesores, y del número de alumnos por clase.
- Cumplimiento del déficit. “Nuestro objetivo es avanzar en la consolidación fiscal y cumplir impecablemente con nuestros objetivos de déficit” Rajoy (diciembre de 2011). El objetivo que exigía Bruselas era del 4,4% hasta que Rajoy se destapó el 2 de marzo con una declaración unilateral fijando el nuevo objetivo en el 5,8% en nombre del interés nacional. El desafío no gustó a las instancias comunitarias que le mandaron un recado al Ejecutivo español para que rectificara la declaración patriótica. Tras el tirón de orejas, Rajoy volvió a rectificar y aceptó el 5,3% como nuevo objetivo de déficit para este año como le sugirieron.Ahora ha planteado a Bruselas aplazar hasta 2014 el objetivo final del 3%.
- Eufemismos. “Decir siempre la verdad, aunque duela, sin adornos y sin excusas: llamar al pan, pan, y al vino, vino”. Rajoy, en su investidura (diciembre de 2011). Ese esfuerzo de claridad se ha llenado de eufemismos. El Ejecutivo llama a la amnistía fiscal “una ley de regularización”; a la reforma laboral “flexibilización de las condiciones para evitar el despido”; a los recortes sanitarios “copago progresivo de los medicamentos”; al aumento del IRPF “recargo temporal de solidaridad” y al del IVA “subida de impuestos indirectos en términos hacendísticos”. El último de los juegos semánticos ha sido a propósito del rescate financiero de 100.000 millones para la banca que el Gobierno prefiere llamar "apoyo financiero" y "préstamo en condiciones favorables para la banca".
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