El Tribunal Superior de Galicia dictamina que el Ayuntamiento vulneró los derechos de una mujer y dos niños pequeños que convivieron dos meses con decibelios excesivos y lo obliga a tomar medidas
El ministerio público le acusa de inducción a la prostitución de menores, abuso sexual, producción de pornografía infantil, exhibicionismo y tenencia ilícita de armas